Como ocurrió la pasada semana en Madrid, el cabeza de serie número seis en Roma, Kei Nishikori volvió a caer derrotado en las semifinales de un Masters 1000 y de nuevo ante su bestia negra, el serbio Novak Djokovic, aunque en el día de ayer, el tenista japonés plantó cara y puso en serios apuros al número uno del mundo que sudó de lo lindo para sacar adelante su compromiso.

Kei Nishikori mostró su tristeza tras finalizar el partido, debido a la gran oportunidad que había desperdiciado, especialmente en el tercer set en el tie break, cuando falló varios puntos inexplicablemente: “Ahora mismo estoy muy triste, estoy simplemente muy avergonzado por haber perdido esa serie de puntos en el tiebreak, realmente decepcionado ya que venía de jugar muy buen tenis en el primer set”, comentó el número seis del mundo.

Para finalizar, el número seis del mundo analizó la derrota ante Djokovic, afirmando que ha disputado su mejor partido esta semana en Roma, jugando muy agresivo y poniendo en serios apuros a Novak Djokovic que llevaba cansancio acumulado del partido de antesayer ante Rafael Nadal: “Estaba jugando agresivo pero dejé de hacerlo en el segundo set, también es verdad que él ahí empezó a jugar mejor. En el tercer podría haberlo hecho un poco mejor pero él me estaba metiendo mucha presión y yo no era capaz de conectar mi primer servicio de la misma forma que en el resto de partidos. Eso me estaba costando un montón de puntos. En el desempate hice demasiados errores no forzados, como por ejemplo los tres consecutivos que cometo con 3-3. Ese fue el error más grande que he tenido hoy", concluyó el tenista japonés que llega a Roland Garros con buenas sensaciones y confirmando que la tierra batida es su superficie ideal.