Dudas, imprecisiones, ansiedad. Eso es lo que se desprende del juego de la afable tenista italiana. Tras un gran inicio de temporada sobre pista dura, se espera una Roberta impetuosa en tierra batida, que hiciera valer sus condiciones de tenis polivalente y variado, capaz de aguantar la bola de fondo de pista en toda circunstancia. Pero nada más lejos de la realidad. Su mal rendimiento en la Copa Federación fue el preludio de una mala racha, en la que ha perdido con jugadoras inferiores a ella, como son Laura Siegemund, Danka Kovinic y Johanna Konta.
Se presenta en Nuremberg tras haber solicitado wildcard, en lo que demuestra la necesidad imperante que tiene por quitarse de encima la inseguridad y malas sensaciones adquiridas durante las últimas semanas. Parte como primera cabeza de serie, y ha logrado pasar la primera ronda no exenta de situaciones incómodas.
Partido repleto de altibajos
No hay partido fácil cuando se está atravesando una profunda crisis de juego y resultados. La experiencia y veteranía que atesora la italiana no están siendo argumentos suficientes para poder desplegar su juego. El primer set ya fue engañoso, ya que tuvo que hacer frente a seis bolas de break provocadas por una Krejcikova que fue creyéndose poco a poco estar en disposición de incomodar a Roberta.
Poco sólida al servicio y sin hacer daño con sus cambios de ritmo de revés cortado
Estuvo acertada la italiana en los momentos cumbre, y eso le permitió adjudicarse la primera manga. Sin embargo, esto no aminoró su ansiedad ni tampoco la motivación y confianza de la checa. Barbora fue mejor en el segundo parcial, dando un repaso a una Vinci muy lenta de piernas y poco precisa con el revés cortado.
El duelo se fue al tercer y definitivo set, donde el vértigo a la victoria afectó a una Krejcikova muy frágil en los puntos decisivos. Vinci sacó garra y corazón para dejar atrás sus dudas y salir victoriosa de un partido en el que lo único positivo fue el triunfo final. Mucho habrá de mejorar su rendiminto Roberta, si quiere ganar a la holandesa Kiki Bertens, consumada matagigantes en el circuito WTA.