Nunca puede darse nada por hecho. Por nombre y por ránking, Kevin Anderson partía como favorito pero analizando la tendencia de ambos en este 2016, no se podía esperar otra cosa que una victoria del argentino, consumado especialista sobre tierra batida. El tenis es impredecible, y es por ello por lo que un jugador en proceso de recuperación y que disputaba su décimo partido en cinco meses, ha logrado someter a un Schwartzman repleto de confianza tras su título en Estambul.

Gran noticia para el tenis mundial la recuperación de un tenista que en 2015 fue un quebradero de cabeza para los mejores, y que llevaba muchos años sumido en una regularidad muy meritoria, que le daba protagonismo en los grandes eventos. Niza se erige en una oportunidad para recuperar las sensaciones y jugar sin presión.

Schwartzman acusó un cierto desgaste físico y mental

El argentino está jugando muchos partidos en lo que va de año, y acumula numerosos kilómetros en pistas del albero. Encadenó la gira latinoamericana con la europea sobre la susodicha superficie, cosechando un éxito mayúsculo como supone el título en Estambul. A partir de ahí las cosas no están siendo fáciles para el argentino, que puede llegar a Roland Garros con demasiado desgaste, habiéndose percibido ciertos síntomas de ello en el torneo de Niza.

Anderson aprovechó al máximo sus oportunidades, mostrándose sólido al servicio y tirando mucho tanto con su derecha como con el revés. Nunca es fácil medirse a un tenista tan aguerrido como Schwartzman, que cambia alturas y velocidades. Sin embargo, Anderson atacó bien la bola auspiciado en una gran movilidad.

Anderson tuvo un punto más de intensidad de piernas

Hubo un intercambio de breaks en la primera manga, que se vio abocada al tiebreak después de que Anderson desaprovechara dos oportunidades para poner tierra de por medio. En el tiebreak estuvo muy preciso, cogiendo la batuta y aacando con eficacia a un Schwartzman algo conservador.

Esperó el error del sudafricano, pero se encontró con la mejor versión de Kevin. El segundo set siguió con una tónica muy similar, en un duelo de estilos apasionante en el que la frescura de piernas del sudafricano hizo que pudiera levantar las dos bolas de break que tuvo que afrontar, y aprovechar él la única de la que dispuso.

Gran triunfo para un Anderson que ha de tomarse con paciencia su regreso al mejor nivel. En segunda ronda se medirá con el ganador del duelo disputado entre Joao Sousa y Víctor Estrella-Burgos. Todo lo que sea pasar horas en pista y coger ritmo, será una buena noticia para el de Johannesburgo.