El joven jugador de 22 años, Dominic Thiem, es el segundo jugador con más victorias en este 2016 por detrás de Novak Djokovic. Se encuentra con plena confianza tras ganar la semana pasada el torneo de Niza donde solamente cedió un solo set. Su tenis sigue creciendo y ya se asienta entre el top 15 de mejores jugadores en el ranking mundial. Su temporada de tierra ha sido fabulosa siendo su superficie predilecta.  Es sobre la arcilla donde más cómodo se encuentra y es también donde sus golpes hacen más daño a sus rivales. Su potente derecha liftada y la adaptación de saques con distintos efectos son las claves de su juego. 

A priori, su rival de hoy, Iñigo Cervantes, se encontraba muy por debajo en el ranking mundial situándose en el puesto número 69. Un partido complicado, engañoso y peligroso ya que el jugador español es un experto sobre la arcilla. La evolución de Cervantes está siendo increíble y es que ha sido en este 2016 donde ha dado el salto de calidad pudiendo participar en los grandes torneos, dejando así en segundo plano los challengers. 

Thiem se vio sorprendido

Cervantes saltó a la pista sin tapujos, donde desplegó su tenis y demostró la casta de la que está hecho. No iba a intimidarse por tener enfrente a Thiem y poco a poco fue ganando confianza sobre la pista, dominando con su derecha y sin regalar ningún punto. Corriendo de lado a lado desesperó al Austriaco que se vio frustrado y sin opciones de sobrepasar a su rival. 

Iñgo cervantes. Foto: Zimbio
Iñgo cervantes. Foto: Zimbio

Impactó golpes ganadores en la primera manga y Thiem no pudo contraatacar desde el fondo de pista como nos tiene acostumbrados. El español se mantuvo al mismo nivel durante todo el set y tras 40 minutos se apuntó la primera manga. 

Thiem, tras verse por debajo en el marcador, salió en el segundo set como una moto, sin dar ningún tipo de oportunidad al hispano. Su derecha y consistencia desde la línea de fondo incrementaron de forma abismal, arrollando todo lo que encontraba por su paso. Nada pudo hacer Cervantes que se tuvo que conformar con su buen nivel de juego hasta ahora.

Un tercer set que cambió el rumbo del partido

Con un set iguales, ambos jugadores sabían de la importancia de la tercera manga y fue donde el nivel del partido se incrementó. Levantaron al público de sus asientos con intercambios increíbles, puntos largos y recursos sorprendentes. No le faltó de nada a esta tercera manga de infarto. Ambos jugadores se rompieron el servicio consecutivamente llegando en el marcador empatados a 3. Thiem que parecía controlar el partido con sus tiros, se vio contra las cuerdas cuando el de Fuenterrabía se colocó con 5-4 y su saque para cerrar la manga. 

Dominic Thiem. Foto Zimbio
Dominic Thiem. Foto Zimbio

Thiem, consciente de la importancia del juego, salió a por todas y consiguió igualar el set 5-5. Fue aquí cuando el partido tuvo un giro radical y nos encontramos con un desconocido Cervantes. La presión de cerrar el set y verse por encima en el marcador pudo con el, perdiendo hasta 6 juegos consecutivos. 

Thiem dominando el partido 2 sets a 1 y en el cuarto set 2-0, Cervantes pidió la asistencia del fisio ya que tuvo problemas en la pierna. Fue un partido muy exigente físicamente donde tuvo que esforzarse al 100% para poner contra las cuerdas al 15 del ranking mundial. Cervantes no se vio con fuerzas de poder remontar y Thiem puso el punto y final a un partido muy complicado. Le servirá como punto de inflexión y seguro que llegará a su cita del próximo miércoles cargado de confianza.