Cuando todo parecía que el décimo Roland Garros de Rafael Nadal podría caer en esta edición, una lesión en su muñeca izquierda le ha obligado a decir adiós al certámen, donde partía como quinto cabeza de serie para conquistar este torneo, donde es el tenista más laureado de toda la historia.

El tenista manacorí entró a la rueda de prensa con la muñeca vendada y los malos pronósticos se cumplieron: el español comentó, con toda la rabia y la decepción, que tenía que abandonar su torneo preferido si no quería terminar de romperse. “Es una de las ruedas de prensa más duras de mi carrera porque Roland Garros es el torneo más importante para mí”, explicó el español. El número cinco del mundo no quiere que se repita lo acontecido hace cuatros años, cuando una lesión le privó de representar a España en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Por este motivo, Rafa ha decidido no forzar y tener un poco de descanso para ser el abanderado español en los próximos Juegos Olímpicos de Brasil que se disputará este verano.

Rafael Nadal estaba desplegando un juego espectacular sobre Roland Garros, venciendo en primera ronda al australiano Sam Groth por 6-1, 6-1 y 6-1 y en segunda ronda ante el argentino Facundo Bagnis por 6-3, 6-0 y 6-3, en un auténtico poderío de buen tenis y de mentalidad ganadora.

Sin Rafael Nadal lesionado, ni Roger Federer, también con una lesión de espalda, parece que Novak Djokovic tiene vía libre para conseguir el único torneo que le falta para completar el póker de Grand Slam, los cuatros mejores torneos de tenis a nivel mundial. Recordemos que el serbio, número 1 del mundo, debería haber sido el rival de Nadal en unas hipotéticas semifinales.