El disfrute del caos. Así puede calificarse cada una de las semanas de circuito femenino en este 2016 marcado por las constantes derrotas de favoritas ante jugadoras secundarias, escaramuzas brillantes para luego desaparecer, y eclosiones inesperadas. En el ecuador de la temporada, se acumulan los nombres propios y esta semana se ha unido uno más y de manera fulgurante, al haber entrado en el selecto grupo que supone el top-10. Pero hay mucho más.

Auge del tenis estadounidense y lucha por top-10

Hay vida más allá de las hermanas Williams. Se está trabajando mucho en la base y los resultados llegan. La hierba ha hecho brillar a dos jóvenes con tremendo potencial, y una fuerza física que se alía con capacidad innata para encontrar golpes ganadores. Y es que Madison Keys no fue la única que brilló.

Coco Vandeweghe en 2016. Foto: zimbio
Coco Vandeweghe en 2016. Foto: zimbio

La que fuera entrenada por Davenport y, posteriormente por Willander, ha logrado un título que viene con regalo extra, al suponer su entrada al top-10 en el que hay tres jugadoras estadounidense. Podría sumarse Coco Vandeweghe si se jugara más sobre césped, porque su capacidad para brillar en esta superficie resulta descomunal. Coco ya es 29 del mundo, y promete dar emociones fuertes en Wimbledon.

Aunque son muchas las candidatas a entrar o regresar al top-10. Una de ellas es Carla Suárez-Navarro, cuya gran actuación en Birmingham la coloca como 13º del ránking. Sus expectativas sobre hierba no son muchas, pero la canaria no defiende prácticamente nada de puntos de aquí a final de temporada, por lo que está ante una posibilidad real de ascender posiciones.

Carla Suárez-Navarro en Birmingham. Foto: zimbio
Carla Suárez-Navarro en Birmingham. Foto: zimbio

Petra Kvitova busca regresar urgentemente a un lugar que no se esperaba que abandonara en estas semanas, y ni siquiera la hierba parece haberle conferido confianza. Veteranas como Kuznetsova y Stosur se mantienen a la expectativa, conscientes de que son capaces de dar un zarpazo en cualquier torneo que las catapulte a la gloria.

Las francesas continúan su ascenso

No solo brillan en el circuito de dobles, donde se erigen en una de las mejores parejas del mundo, sino que las jóvenes Caroline García y Kristina Mladenovic no dejan de lado su progresión en el circuito individual. Dieron espectáculo en Mallorca con su juego fresco e incisivo, llevándose el título la primera de ellas.

Están en el top-30 y prometen dar mucha guerra en los próximos torneos. Elegantes, ofensivas y brillantes en la red, atesoran las condiciones soñadas por el chovinista tenis galo, que percibe en ellas verdaderas heroínas nacionales.

Otras mediáticas, como Wozniacki, Bouchard o Ivanovic, siguen ancladas en un mar de inseguridades y no logran desarrollar su tenis con continuidad, viéndose desplazadas de los primeros puestos del ránking.