Tras su prematura derrota en Birmingham, la polaca Agniezska Radwanska, tercera del mundo, busca en el torneo de Eastbourne (Sur de Inglaterra) la confianza necesaria de cara a Wimbledon, que comienza el próximo lunes. De momento su debut ha sido más satisfactorio al vencer a la croata Mirjana Lucic-Baroni por retirada de esta, aunque Radwanska ya ganaba por 6-4 y 2-1.

La polaca ofreció su habitual solidez desde el fondo de pista​Radwanska, campeona en este mismo escenario en 2008, no tuvo que hacer gran cosa para llevarse el encuentro. Le bastó con poner una bola más ante una rival que optó por un tenis muy directo que sólo le dio resultado durante unos pocos juegos.

El choque comenzó con un rápido 3-0 para la polaca que sin embargo vio cómo su rival establecía de inmediato el empate a 3 en el marcador. La mejoría de Lucic-Baroni fue momentánea, ya que enseguida volvió a cometer varios errores no forzados que le costaron el primer set en el décimo juego. Hay que reseñar que la nº 56 del mundo ya había sido atendida por los médicos a mediados del set por problemas estomacales.

El físico de Lucic sólo duró tres juegos tras el primer set

Esa atención médica fue el preludio de lo que iba a ocurrir poco después. A pesar de comenzar con break arriba, la croata no pudo confirmar esa rotura y tras el tercer juego del segundo parcial no pudo más y le dio la mano a su rival en señal de retirada tras 48 minutos de juego.

En la siguiente ronda la polaca se medirá a la canadiense Eugenie BouchardEste desenlace agridulce del encuentro no permite salir de dudas sobre el estado real de Radwanska, que en lo poco que duró el encuentro, no ofreció una mejor imagen con respecto a su actuación en sus anteriores torneos. Tendrá que ir mejorando conforme avanza en torneo si quiere llegar con buenas sensaciones a Wimbledon.