No hay relajación posible, nada se puede dar por hecho en un circuito tan competitivo como el femenino. Dos de las que partían como favoritas para hacer un gran torneo en esta semana previa a Wimbledon, se ven apeadas del evento por tenistas con peor ránking que el suyo. La ilusión brilla al ver surgir nuevas estrellas, que no se ven frenadas por tenistas en teoría superiores a ellas.

Puig en vías de eclosión definitiva y Petkovic hundida

La puertorriqueña ya viene avisando desde hace tiempo de su potencial, y curiosamente ha sido la hierba la que ha hecho que aflore en su máximo apogeo. La semifinalista en Nottingham también lo es ya en Eastbourne, gracias a un espectacular nivel de tenis encontrando golpes ganadores con relativa facilidad y haciendo gala de una magnífica movilidad.

Pudo alzarse victoriosa en un duelo de gran igualdad ante Mladenovic; la francesa intentó variar ritmos con dejadas y subidas a la red, pero sus nueve dobles faltas fueron un lastre demasiado pesado. Puig jugó con una potencia superior y pudo ganar por 7-6 (6) 4-6 6-3.

Por su parte, Petkovic continúa en su caída libre, viendo cómo su juego otrora sólido ahora es poco incisivo. Es superada por potencia por sus rivales, pero también por físico, algo que se vio ante una jugadora de su "quinta" como Makarova. La rusa dio la vuelta al partido con la complicidad de una Petkovic poco regular en su juego y movilidad. 3-6 6-4 6-0 fue el resultado final.

Pliskova solventa el trámite

La flamante campeona en el torneo de Nottingham sigue postulándose como una de las grandes favoritas de cara a Wimbledon. Su habilidad para jugar sobre hierba es innata, y así lo está demostrando en estas semanas de aproximación. Ya se encuentra en cuartos de final, tras derrotar a la nipona Misaki Doi por 6-2 6-4.

Elena Vesnina será la rival de la checa en la antepenúltima ronda del evento, en lo que promete ser un duelo apasionante entre dos consumadas especialistas en esta superficie.