El partido que se disputó esta tarde en Londres fue muy parejo si se mira el resultado. Sin embargo la solvencia demostrada por el suizo a la hora de servir marcó la diferencia. No perdió ningún juego con su saque y obligó al argentino a equivocarse en puntos decisivos.

Fueron 16 puntos ganadores contra nueve de Pella los que tuvo Federer al comienzo del partido. Seguramente la presión en el joven de 26 años y sobre todo la ansiedad, en momentos claves, le hicieron perder el control de un partido que de a poco se iba inclinando para el ex número uno.

Con mayor porcentaje de primeros servicios en juego que el argentino, Federer volvió a ampliar la ventaja y definió una nueva manga a través del tie-break. Otro factor importante, fue la cantidad de devoluciones ganadoras que tuvo Roger, veintidós contra seis de Pella.

Ya para culminar el pleito, Federer se anticipó y quebró el séptimo juego para imponerse en el marcador y así decantarlo 4-3 a su favor. Anímicamente, su rival estaba completamente sin ideas y en ciertas ocasiones forzando puntos innecesarios. 

 ¿Podrá conseguir su octava corona en Wimbledon?

A sus 34 años, la leyenda tenística intentará seguir firme en la hierba londinense y avanzar a instancias finales. Su palmarés en la tierra donde más se ha destacado es: Campeón en la edición 2003, 2004, 2005, 2006, 2007, 2009 y 2012. Dada su ambición y talento, difícilmente baje los brazos en el jardín de su casa (Wimbledon).

Ganó Federer y ahora se cruzará en la segunda ronda del Grand Slam británico a un jugador que viene de clasificar en la Qualy, el inglés Marcus Willis, quien venció a Ricardas Berankis por 6-3; 6-4; 6-4.