Tras las numerosas ausencias en Toronto, hay muchos jugadores que aspiran a dar la sorpresa y levantar la Rogers Cup, con permiso de Novak Djokovic. Durante la madrugada, dos de esos grandes aspirantes hicieron los deberes y accedieron a la siguiente ronda. La gran esperanza local, Milos Raonic, derrotó al desconocido Donaldson por un cómodo 6-2 y 6-3. Tomas Berdych, por su parte, sufrió para llevarse el partido contra Ryan Harrison con un ajustado marcador de 6-4, 6-7(2) y 6-4.
El ídolo local, en gran estado de forma
Milos Raonic llega a este torneo pleno de confianza tras ser finalista en Wimbledon, y dispuesto a triunfar ante su gente. El canadiense ha encontrado un filón en su volea esta temporada, la cual ha mejorado hasta niveles altísimos, y su servicio y golpe de derecha siguen desbordando como siempre. Ante Donaldson, Milos no encontró demasiada resistencia, y sus golpes funcionaron a la perfección.
Raonic no concedió una sola bola de break
El primer y segundo set fueron fiel reflejo el uno del otro, con Raonic exhibiendo su potencia al saque y sin bajar la guardia en ningún momento. Tanto fue así, que el jugador local no tuvo que afrontar ni una bola de break en contra en todo el encuentro. Al resto, Milos encontraba huecos por doquier, y supo aprovechar sus oportunidades para llevarse el partido por 6-2 y 6-3.
Berdych sufrió ante una de las revelaciones del torneo
Más complicada era la papeleta que le tocó a Tomas Berdych, otro de los candidatos a llegar a las últimas rondas del torneo. El checo se enfrentaba a Ryan Harrison, quien tras mucho tiempo en el dique seco parecía haber recuperado un buen tono de juego, lo que quedó patente en su victoria ante John Isner la jornada anterior.
El partido comenzó como se esperaba, a ritmo de saques. Berdych distribuía con criterio su potente derecha, mientras que Harrison se aferraba a su potente servicio para sacar los juegos adelante. En estas se llegó al décimo juego, y un nervioso Harrison concedió las primeras bolas de rotura del encuentro. El checo supo aprovechar la ocasión y cerrar el parcial por 6-4.
El segundo set fue una demostración de la evolución de Harrison en este torneo. Fue idéntico al primero, solo que la situación de tensión se vivió con 6-5 para Berdych y saque para el americano. En este momento el checo dispuso de una bola de partido, pero Harrison fue capaz de levantarla y llegar al tie break. Ryan jugó pleno de confianza, y se adjudicó el desempate por 7-2, llevando el partido a un definitivo tercer set.
La tecera manga fue muy distinta a las otras dos, porque la rotura se produjo muy pronto. En el tercer juego, Harrison se desconcentró y Berdych supo leerlo a la perfección. A partir de aquí, el checo se concentró en mantener sus servicios y se llevó el encuentro por un ajustado 6-4, 6-7(2) y 6-4.
En la siguiente ronda se enfrentarán a dos rivales a los que nadie quiere ver. Berdych se medirá al número uno del mundo y campeón de dos 'majors' esta temporada, Novak Djokovic. Raonic, por su parte, deberá hacer frente a Gael Monfils, que llega lanzado a Toronto tras su conquista del torneo de Washington.