Todas las miradas en el cuadro femenino estaban puestas sobre Serena Williams. La tenista estadounidense, gran dominadora del tenis mundial en los últimos años, no está viviendo su mejor temporada y 'sólo' ha conseguido un título de Grand Slam hasta la fecha, un bagaje pobre a tenor de lo conseguido por la norteamericana durante las últimas temporadas. El descenso en su rendimiento y la pujanda de jugadoras como Angelique Kerber y Garbiñe Muguruza han provocado que la número uno del mundo pueda perder su posición al frente de la clasificación en el US Open 2016.

Y es que la menor de las Williams debe llegar a la final para mantenerse en lo más alto del ránking mundial, un camino nada fácil tras las dudas sobre su estado físico y su díficil camino hasta el último partido del torneo, comenzando por su estreno ante Ekaterina Makarova, una tenista siempre competitiva y que ya ha demostrado a lo largo de su carrera que puede poner en dificultades a cualquier rival. El estreno no era sencillo para Serena, que sin embargo ofreció buenas sensaciones en el Arthur Ashe Stadium y solventó por la vía rápida su encuentro de la primera ronda del US Open.

Dos parciales y un mismo guión

La jugadora estadounidense comenzó el encuentro de manera impecable con su servicio, pues tras ceder el primer punto logró cuatro golpes ganadores (dos en forma de saques directos) para apuntarse el primer juego del encuentro. Más dificultades tuvo la jugadora rusa para igualar el encuentro, pero aprovechó los errores desde el fondo de la pista de Serena para mantenerse en el partido y no ceder su saque a las primeras de cambio. Ambas tenistas mejoraron sus prestaciones con el saque, con la tenista local ganando fácil su saque y Makarova logrando un juego en blanco para colocar el 2-2 en el marcador.

Serena finalizó con el 90% de puntos ganados con el primer servicio

Otro juego sencillo para Serena Williams, con varios golpes ganadores, fue la antesala del primer punto de inflexión del encuentro. La tenista estadounidense aprovechó varios errores de la jugadora rusa para disponer de dos bolas de 'break' al resto, una situación que una de las mejores jugadoras de la historia de este deporte no suele desaprovechar. Así, en la segunda de estas ocasiones, la número uno del mundo rompió el saque de su rival y consolidó la rotura con su servicio, logrando un 5-2 que se antojaba insalvable para su rival. Ekaterina Makarova se aferró al set con su servicio, pero acabó claudicando desde el resto ante la potencia de la menor de las Williams (6-3).

Con el primer objetivo cumplido, la norteamericana afrontó con mayor tranquilidad la segunda manga, pero se encontró con una buena versión de su rival, que comenzó muy acertada con el servicio y añadiendo presión a la raqueta de la número uno del ránking mundial. Pero una jugadora de la calidad y la trayectoria de Serena Williams está acostumbrada a la presión, y la jugadora local siguió firme con su excelente servicio para mantener la igualdad en los compases iniciales del segundo parcial, manteniendo el 2-2 en el electrónico.

Serena Williams consiguió hasta 12 saques directos y 27 golpes ganadores | Foto: zimbio.com
Serena Williams consiguió hasta 12 saques directos y 27 golpes ganadores | Foto: zimbio.com

Al igual que sucedió en el primer set, fue en el tercer turno de saque de la jugadora europea cuando llegó el punto de inflexión. Serena realizó un juego perfecto, logrando un golpe ganador y aprovechando los tres errores no forzados de Makarova para apuntarse en blanco el juego y lograr un 'break' que resultaría definitivo para el devenir del encuentro. La menor de las Williams consolidó la rotura y, pese a que Ekaterina Makarova consiguió de nuevo mantenerse en el encuentro gracias a su servicio, la ventaja era irrecuperable ante una tenista como Serena Williams, que acabó imponiéndose por 6-3 y logrando el pase a la segunda ronda del US Open 2016, donde se enfrentará a su compatriota Vania King.