Habrá quinto asalto. Novak Djokovic cumplió con las expectativas y derrotó en tres mangas (6-4, 7-6(5) y 6-2) al número uno checo Tomas Berdych. Con este triunfo, el número dos del mundo otorga el cuarto punto de la eliminatoria a Serbia, propiciando la igualada (2-2) en la final de la Copa Davis. En el quinto encuentro se enfrentarán el joven Dusan Lajovic y el veterano Radek Stepanek.

Tal y como se esperaba, Djokovic y Berdych se erigieron como las grandes figuras para la disputa del cuarto punto, que pudo haber sido el definitivo. A pesar de disponer de un día menos de descanso (tras el dobles del pasado sábado), Berdych demostró en el inicio del encuentro que estaba dispuesto a dar guerra.  El checo se agarró a un gran servicio, gracias al cual pudo solventar un 15-40 en el cuarto juego. Se vislumbró mucha equidad sobre el cemento, reflejada también en el marcador: 4-4. El serbio solventó su juego con contundencia, como a lo largo de toda la manga, metiendo toda la presión en la figura de Berdych. Se sirvió la batalla y se disfrutó de un gran tenis en ese servicio de Tomas. En los quince minutos que duró el juego, hubo multitud de opciones para ambos, pero finalmente fue Djokovic quien, tras nueve bolas de break perdidas, se apuntó la primera manga (6-4).

El guion de la segunda manga fue bastante semejante. Djokovic siguió cómodo desde el fondo de la pista, y Berdych se aferró a su derecha. Ambos mejoraron su registro con el servicio. La única diferencia con la primera manga fue que Berdych tardó en sufrir el miedo escénico. Aguantó en las dos situaciones en las que sirvió para mantenerse con vida (5-4 y 6-5) y alcanzó el desempate. Ahí, la derecha del checo ganó terreno. Sacó de la pista a Djokovic, que se mostró muy frustrado por momentos (lanzado en más de un punto la raqueta contra el suelo). Pero la situación giró en un instante. El checo, 4-5 arriba con dos servicios a su disposición, volvió a mostrar su mayor defecto: la falta de determinación ante los grandes. El único tenista que se presentó en Londres sin un solo título, cometió tres errores consecutivos permitiendo así al serbio hacerse con la segunda manga por 7-6(5).

Fruto de los esfuerzos en vano, Berdych se dejó llevar en el tercer acto. Aún con la mente puesta en las oportunidades desperdiciadas, cedió el saque a las primeras de cambio, propiciando una tempranera ventaja de Djokovic (3-1). A contracorriente, tan solo pudo sumar otro juego en lo que restaba de parcial. El número dos del mundo, entusiasmado, volvió a quebrar el servicio del checo al final de la manga. Con la locura en la grada, a causa del continuo levantamiento de brazos de Nole, y a lo grande, con un ace, finiquitó el serbio el set (6-2) y, por tanto, el encuentro.

Ahora, la serie se iguala a dos y se decidirá la final en el partido entre los números 2 de ambos equipos: el local Dusan Lajovic y el checo Radek Stepanek.