La gillotina cayó a primera hora sobre la cabeza de John Isner. El gigante americano llegaba a la primera gran cita del 2014 con banderas desplegadas después del tenis demostrado en su primer torneo del año, el ATP 250 de Auckland. Con el trofeo neozelandés y 455 mil dólares bajo el brazo, arribó Isner al Melbourne Park.

Pero el tenis no conoce de rankings ni méritos. Su rival, el eslovaco Martín Klizan, le plantó cara al preclasificado #13 del Australian Open y en menos de media hora se adjudicó el primer set por 6-2. El bochorno australiano hizo mella en el americano quien se mostraba desencajado en la cancha. Sus armas principales, el servicio y la derecha, no encontraban las zonas adecuadas. Por su parte, Klizan demostró que el 2014 puede ser la temporada donde logre recobrar su mejor ranking tras problemas físicos (#26).

Los intercambios desde el fondo de la pista siguieron la misma línea. Un avispado Klizan desde la línea de base esperando el yerro de Isner. Los dividendos llegaron hasta el tiebreak, el cual se definió por 8-6.

La señal de Isner hacia su banquillo fue inminente. El espigado norteamericano se acercó a la red para estrechar la mano de su oponente demostrando la razón de la mayoría de los abandonos en el Australian Open: la combustión física por el extremo clima.

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Sobre el autor
Alan Núñez
Mexicano de nacimiento, poblano de corazón. Director General de VAVEL México. | The Big Apple. Editor-in-Chief of VAVEL USA.