Andy Murray se ha convertido en el séptimo cuartofinalista, siguiendo la estela de Rafael Nadal y Grigor Dimitrov, quienes ya lo habían hecho con anterioridad durante esta jornada, tras derrotar al tenista francés Stéphane Robert, Lucky Loser que llegó al torneo tras confirmarse la baja del alemán Philipp Kohlschreiber, y que desde entonces había logrado avanzar rondas sin hacer ruido pero causando una grata impresión entre la afición aussie. A falta de un jugador local al que apoyar, la grada australiana se había volcado con el sorprendente jugador francés, cuya trayectoria rocambolesca enamoró al respetable.

Sin embargo, su andadura en el primer Grand Slam del año ha finalizado en los octavos de final tras caer derrotado ante el británico Andy Murray, cuarto cabeza de serie del torneo, quien continúa presentando sus credenciales de cara a convertirse en un serio candidato a llevarse el torneo a sus vitrinas. Murray, que venía de vencer en las tres primeras rondas a Go Soeda, Vincent Millot y Feliciano López, respectivamente, sin haber cedido ningún set en el camino, halló mayores dificultades a la hora de resolver su duelo ante Robert, quien le complicó las cosas hasta el punto de arañarle un set en el camino. El marcador final (6-1, 6-2, 6-7 y 6-2), reflejó el transcurso del partido, una batalla que se desenvolvió en su práctica totalidad en favor del jugador escocés pero que, sin embargo, mantuvo el enfrentamiento en ciertos puntos.

Robert fue incapaz de sobrellevar la paciencia de Murray en el golpeo, la maestría del británico a la hora de dominar los intercambios fue superior al jugador francés, que, impotente, luchó por abrirse oportunidades mostrando su mejor tenis. La experiencia de Murray fue un factor con un peso demasiado relevante para evitar que el favorito se llevase, finalmente, un partido que quedó exento de excesiva historia. Robert, con ello, hace las maletas con la mirada puesta ya en su siguiente objetivo, mientras el cuarto favorito se mantiene en pie y con la vista fija en su objetivo.

El siguiente paso de Andy Murray hacia la gran final del domingo tendrá lugar el próximo miércoles, cuando se enfrentará, en su correspondiente duelo de cuartos de final, ante el vencedor del último duelo de la jornada, un partido entre dos jugadores con opciones de llegar lejos como el francés Jo-Wilfried Tsonga y el suizo Roger Federer en el que finalmente este último logró imponerse en tres mangas. De la decisión de este encuentro dependerá la suerte de un Murray que ha sido finalista en Australia en tres de las últimas cuatro ediciones, sólo exceptuando la de 2012, habiendo caído en todas ellas ante su bestia negra, el serbio Novak Djokovic, y que buscará en este 2014 redimirse de sus derrotas.