Tras unos primeros impases del encuentro en que ambos jugadores mantuvieron su servicio, el búlgaro no quería complicaciones e iba a aprovechar los errores que su rival dejase para adelantarse en el marcador. En el tercer juego del partido, tras dos errores de Bautista, éste cedió su servicio. 3-1. Bautista lo intentaría todo para recuperarlo pero el servicio del búlgaro parecía de otro planeta. Velocidad,  soltura, cambios de dirección… Poco pudo hacer el español para contrarrestar los ataques tanto de derecha como de revés de Dimitrov, que acabaría apuntándose la primera manga por 6-3.

Bautista seguía tranquilo por la pista pese a los errores del primer set, pero sabía que le iba a llegar su oportunidad. Es conocido por todos, los baches de concentración en el jugador búlgaro y esta vez no iba a ser menos. El español aprovechó que en este segundo set el porcentaje de primeros servicios bajó para apuntarse un break a las primeras de cambio y que ya no dejaría recuperar. 6-3 para Bautista Agut. El partido se iba a decidir en 4 o 5 sets.

Pese a que el español se llevaba el segundo set, Dimitrov no quería que este partido se alargara demasiado si quería tener alguna opción en el siguiente choque, por eso apretó el acelerador y empezó a repartir juego tanto con la derecha como con el revés, sobre todo el cortado, que además con el poco aire que hacía todavía dificultaba más aún las réplicas de su rival. Hasta en dos ocasiones rompió el saque del español el búlgaro, la segunda vez para cerrar la tercera manga por 6-2.

El cuarto parcial empezaba con ambos jugadores muy igualados y sabiendo que cualquier error del rival iba a ser crucial para el devenir del encuentro. No supo aprovechar las dos bolas de break que tuvo el español para adelantarse y poner más nervioso al búlgaro. Y ya se sabe que en este deporte quien no sabe aprovechar las oportunidades lo acaba pagando. Empatado el partido a 4 juegos, Dimitrov se puso nervioso dando la oportunidad a su rival de romper el servicio, pero tampoco supo aprovechar esa oportunidad, y tras remontar el juego se colocaba 5-4 en el marcador a la espera del servicio del español. Esta vez, el saque que de tantos apuros había sacado durante todo el torneo no le ayudó y acabó cediendo esta manga por 6-4.

Aquí acababa el sueño australiano para Bautista, pero se va con la cabeza bien alta, derrotando a todo un Juan Martín del Potro en Segunda Ronda y desplegando un tenis digno de top 10. Toca esperar pero Roberto está con opciones de entrar en la convocatoria de la Copa Davis que el próximo fin de semana se enfrenta a Alemania para un puesto en los cuartos de Final.

A Dimitrov le espera ahora en cuartos de final, Rafael Nadal, dará guerra, luchará y peleará para intentar acceder así a sus primeras semifinales de un Grand Slam. La eterna promesa ha llegado para quedarse.