Los principales favoritos, ambos locales, tan solo tienen un obstáculo antes de la gran final esperada por el público galo. Richard Gasquet, que superó (7-5 y 6-3)  Ivan Dodig, aguarda al siempre peligroso Ernests Gulbis, verdugo de Nicolas Mahut. Por la parte baja del cuadro se enfrentarán Jo-wilfried Tsonga, que apeó a Roger Vasselin en tres mangas (6-7. 6-2 y 6-2), y a Jan-Leonnard Struff, que apenas sufrió ante Michael Llodra (6-4 y 6-3).

A pesar de lo previsto, Gasquet requirió de su mejor tenis para imponerse en su duelo de cuartos de final. El cómodo inicio (llegó a servir para el 4-1) no fue más que un espejismo en un partido que se decidió por pequeños detalles. Y es que Dodig, tras recuperar  instantáneamente el break (3-2), aguantó el pulso hasta el final de la manga. Pero sacando para forzar el desempate, no pudo controlar la presión. El francés, que olió el miedo del croata, atacó y se adjudicó la primera manga (7-5). En la segunda, la tranquilidad a la hora de afrontar los momentos decisivos, fue clave. Gasquet, que salvó tres bolas de ruptura, aprovecho la única oportunidad al resto para abrir brecha al inicio (3-0). La desventaja se hizo insalvable para Dodig, que se desinfló de nuevo en el final (6-3).

En semifinales Gasquet tendrá un rival de mayor entidad. Un hombre que con el permiso de su cabeza, es capaz de plantar batalla a cualquier tenista del planeta: Ernets Gulbis. El letón comenzó enchufado (3-0) y se valió de un excepcional servicio (100% de puntos ganados con el primer saque) para mantener su ventaja durante el transcurso de todo el primer acto (6-3). Su rival, Mahut, no se dio por vencido. El tenista local, empujado por el público, fue capaz de llevar a Gulbis al desempate en la segunda manga. Pero ahí, apenas fue capaz de sumar un punto antes de terminar inclinando la rodilla.

En la otra semifinal se verán las caras Tsonga y Struff. El francés fue el que más sufrió de los cuatro para sellar su acceso a las semifinales. Su compatriota Roger Vasselin le sorprendió en el primer set, donde el gran servicio de ambos los abocó al tie-break, cayendo este del lado del sexto favorito. Pero la reacción de Tsonga no se hizo esperar. El segundo cabeza de serie empezó a golpear con dureza con su derecha. Arriesgo como acostumbra, con mucho acierto. Así, antes de sellar el partido (6-7), 6-2 y 6-2), tan solo le permitió a su compatriota apuntarse cuatro juegos (ninguno consecutivo).

Inmerso en la batalla de los principales favoritos, emerge la figura de Struff. El alemán superó con contundencia (6-4 y 6-3) a un Llodra que no reflejó las sensaciones de estos días, en los que su motivación ha crecido por ejercer como local.

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Sobre el autor
Alberto Puente
Redactor en Tenis VAVEL. Pasé seis meses en MARCA. Colaboré en la revista mexicana TennisLife y en Industria del Tenis. Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid.