La estadounidense Serena Williams sigue haciendo gala de su potencial en Madrid. Esta mañana de jueves saltó a la pista Manolo Santana con la vista puesta en seguir peleando por el título y así se lo hizo saber a la rusa María Kirilenko. En poco más de una hora de encuentro, la americana conseguía la victoria con un resultado de 6-3 y 6-1. La vigente campeona quiere seguir haciendo historia en la capital y buscará las semifinales ante la tenista española Anabel Medina, que accedió a esta ronda debido a la retirada de su rival, la kazaja Yaroslava Shvedova. Así, la de Torren deberá intentar acabar con la resistencia de Serena para regresar a las semifinales de una gran competición.

El encuentro duró demasiado poco. El inicio fue igualado, con momentos de nervios para las dos jugadoras que todavía se estaban tanteando. Se llegaba al 3-3 del primer parcial sin ninguna ocasión para romper el saque de la rival. Fue el momento del despegue del juego de la mejor jugadora de la WTA. No dejó lugar a ninguna duda y con un tenis potente desde el fondo rompió los esquemas de Kirilenko. El segundo set fue un paseo para Serena que estuvo muy cerca de conseguir el rosco. Al final, la rusa maquilló el resultado ante la relajación de su pareja de baile. Serena ganó sin esfuerzos y ahora sitúa en su horizonte a Anabel Medina.

Sharapova se lleva un partido loco

Todo lo contrario fue el partido de la rusa María Sharapova. Su rival en la pista hoy, la alemana Sabine Lisicki, número 39 del ránking, planteó más problemas de los esperados. Casi se alcanzaron las dos horas de partido para acabar con un marcador de 6-2 y 7-5 favorable a la siberiana. Así, la número dos del mundo quiere tratar de empezar a recortar la ventaja que le separa de Serena Williams y acometer su regreso al liderato de la clasificación WTA. La victoria le da el acceso a los cuartos de final, donde espera como rival a la vencedora del encuentro que deben disputar la estonia Kaia Kanepi y la eslovaca Daniela Hantuchova, que jugarán en el Estadio 3 en el primer turno de la tarde.

El primer set estuvo protagonizado por las numerosas roturas que se vieron. Hasta cuatro consiguió la rusa y dos la alemana en un parcial donde se jugaron únicamente ocho juegos. Ambas jugadoras estuvieron con porcentajes por encima del 50 por ciento pero la tierra no es sinónimo de éxito con el saque. Al final, la lotería cayó del lado de Sharapova que afrontaba el segundo set con más garantías. De nuevo la segunda manga tuvo muchas alternativas. Empezó la alemana más enchufada y fruto de ello consiguió un break para ponerse con 3-1. Sin embargo, la rusa pronto empataría el marcador y se escaparía con otro quiebre definitivo en el undécimo juego, que ya no desperdiciaría.