El Mutua Madrid Open vivirá, al menos en su edición femenina, la final más esperada. La número 1 del mundo, Serena Williams, se verá las caras en la pelea por el título con su subalterna, Maria Sharapova, en una reedición de los cuartos de final de 2012 en este mismo escenario, cuando la norteamericana se impuso con toda claridad cediendo apenas cuatro juegos en el envite. Ambas han conseguido sus respectivos billetes al conseguir sendas victorias, con cierta comodidad, en sus encuentro de semifinales.

La potencia al rescate de la Williams

Serena Williams abordaba este sábado su encuentro con muchas dudas. Su mal partido de cuartos de final ante Anabel Medina, llegando a estar a apenas dos puntos de la eliminación y teniendo que sacar su mejor versión en el tercer set, no auguraba una semifinal sencilla ante la siempre luchadora Sara Errani, y así fue como comenzó el encuentro. La italiana demostró haber tomado buena nota de la recetada aplicada 24 horas antes por la tenista de Torrent para aplacar a la estadounidense y, agresiva y decidida, tomó el mando del partido moviendo con profundidad y ángulos a la número 1. El esquema le dio rédito durante más de media hora, mandando hasta dos veces en el marcador break mediante.

Sin embargo, superado el ecuador de la manga inicial, Serena despertó. Arriesgó tratando de acortar los puntos y la táctica no pudo salirle mejor, al recuperar el quiebre que había cedido previamente y posteriormente dándole la vuelta al set poniendo así tierra de por medio. Errani trató de enmendar el error pronto, pero tras no aprovechar las bolas de rotura de que dispuso en el juego inicial de la segunda manga se vino abajo, y empezó a sufrir el vendaval de una Serena más atinada que el viernes, que cerró el encuentro 7-5 y 6-2.

Sharapova no encontró rival

En la otra semifinal la rusa Maria Sharapova enterró con celeridad (6-4 y 6-3) las opciones de una pujante Ana Ivanovic, que sigue acercándose al nivel que mostrara hace años pero sigue adoleciendo de falta de confianza cuando se enfrenta a las tenistas más importantes. La serbia fue aguerrida, directa y peleona en el comienzo (3-3 en el primer set) pero a partir de ese momento mostró su sempiterna irregularidad, cosechando multitud de errores no forzados que facilitaron la tarea de una Sharapova en muy buena forma.

En el segundo set volvió a plantar pelea Ana llegando nuevamente a una situación de empate a tres juegos, pero ahí flaqueó otra vez y encajó tres juegos consecutivos, en un festival de errores propios y golpes magistrales de la zarina, para firmar una derrota en semifinales de un WTA Premier Mandatory, instancia que no alcanzaba desde Miami 2012. Se clasificaba así Masha para su primera final en Madrid, habiendo caído en 2012 en cuartos de final precisamente ante Serena Williams.

En la edición de 2012 ambas tenistas se cruzaron en cuartos de final. Entonces Williams se hizo con una cómoda victoria por 6-1 y 6-3, pero en este 2013 -ya con tierra batida tradicional- pese a su manifiesta superioridad frente a la siberiana (12-2 en duelos particulares, 2-0 en 2013 y no pierde ante ella desde 2004) ha demostrado una peor forma. Sufrió en varios de sus partidos, especialmente el viernes ante Anabel Medina, y parece en un peor momento físico que Sharapova, más fina esta especialmente en el desplazamiento lateral y al servicio.