El Open de Australia 2014 ya ha inaugurado su palmarés. Las italianas Sara Errani y Roberta Vinci se han convertido, tras derrotar a las rusas Ekaterina Makarova y Elena Vesnina, en las campeonas del torneo en la modalidad de dobles femeninos por segunda ocasión consecutiva, revalidando así la corona obtenida el pasado 2013.

Errani y Vinci, números 1 de la especialidad que conservarán tal honor al salir victoriosas del Melbourne Park, comenzaron el partido con seriedad, jugando muy bien de fondo y demostrando más habilidad en la media pista que las del tenistas del este europeo, abonadas a la potencia y que no encontraron el toque en el primer set, anotado en el marcador de las transalpinas. Diferente fue el panorama en la continuación, cuando Vesnina y Makarova, más centradas, encontraron el hueco para burlar el juego casi perfecto de las compenetradísimas italianas, que vieron enjugada su diferencia yéndose la contienda al tercer y definitivo set.

Con el título en juego, el tercer set fue de infarto. Errani y Vinci empezaron por delante (2-0) para, posteriormente, entrar en un bache. Largo, prolongado, tanto que les llevó de empezar a saborear las mieles del triunfo con el break de ventaja a ceder cinco juegos consecutivos, restando 5-2 abajo. 

Parecían muertas las del país de la bota cuando llegó su reacción. A la puerta del crematorio reaccionaron no solamente para alargar el partido, sino para darle la vuelta al mismo como un calcetín. Tanto que ni siquiera llegaron a la situación de afrontar bola de partido en contra, y un torrente de puntos comenzó a caer de su lado para desesperación de las rusas. Makarova y Vesnina sufrieron en sus carnes lo que no supieron aprovechar antes, y apenas firmaron cuatro de los siguientes 24 puntos en juego, para caer con crueldad ante el oficio de las mediterráneas, que conquistaron su segunda corona consecutiva en el país de los canguros con épica y garra.

Más campeones

Sara Errani y Roberta Vinci son por el momento las únicas que estrenan el palmarés de los jugadores profesionales en Melbourne, pero no las únicas del torneo. También este viernes se disputaron otras finales, del circuito junior y del de silla de ruedas.

En el junior masculino, la pareja austriaca formada por Lucas Miedler y Bradley Mousley, quintos cabezas de serie, se impusieron a los terceros favoritos, los galos Quentin Halys, principal esperanza de los bleus de cara al futuro, y su compañero Johan Sebastien Tatlot por 6-4 y 6-3. En el cuadro femenino, una pareja rusa vengó a sus compatriotas Vesnina y Makarova. Fueron las primeras cabezas de serie, Anhilina Kalinina y Elizaveta Kulichkova, que se impusieron en la final esperada a las segundas favoritas, la británica Katie Boulter y la serbia Ivina Jorovic, por un cómodo marcador de 6-4 y 6-2.

También, por parejas, se disputaron las finales del circuito ITF de tenis en silla de ruedas. Curiosamente se dio el mismo resultado en los cuadros masculino y femenino, al vencer en ambos casos los primeros cabezas de serie a los segundos. En hombres, el francés Stephane Houdet y el y el japonés Shingo Kunieda vencieron al británico Gordon Reid y el holandés Maikel Scheffers por un doble 6-3. En mujeres, la nipona Yui Kamiji y su compañera británica, Jordanne Whiley, vencieron a las neerlandesas Marjolein Buis y Jiske Griffioen por 6-2, 6-7(3) y 6-2.