Primer torneo de gusto para el hincha; el segundo fue extraño y diferente

Con estos contrastes, se puede denominar el año que afrontó el onceno de la ‘ciudad bonita’. El equipo dirigido por José Manuel ‘Willy’ Rodríguez en todos los compromisos siempre salió a buscar el arco contrario. La coordinación en el medio campo siempre fue clave para los partidos del Torneo Águila en los dos semestres, porque de ella siempre dependió la manera de defender y de crear ideas para los delanteros.

Zona defensiva impecable y estable

Sólo 20 goles recibidos en 38 partidos disputados a lo largo del año, hablan de una defensa con mucho trabajo por parte del cuerpo técnico, que no dio ventajas a sus rivales y aunque por momentos desentonaba en algunos partidos, siempre intentó asegurar en cero en la portería de James Aguirre y Andrés Felipe Mosquera Marmolejo. Defender el juego aéreo y los mano a mano con los delanteros, fueron las principales características de la parte defensiva.

Medio campo sólido y creativo

Durante todo el año, Atlético Bucaramanga tuvo un medio campo aguerrido, fuerte en marca y rápido en la manera de atacar y crear situaciones de gol en campo ajeno. Carlos Giraldo se consagró como el principal volante, que no se hizo notar mucho en los partidos, pero que de él siempre dependió el primer pase defensa a ataque. A lo anterior, hay que agregarle que ‘La Moña’ como popularmente se le conoce, siempre estuvo atento a los relevos defensivos de sus compañeros y a colaborar en marca cuando el compromiso lo necesitó. Así mismo, Luis Alfredo Sierra también fue artífice de tener una zona de volantes con mucha presencia en marca, el volante cartagenero siempre estuvo coordinado con Giraldo para evitar los constantes ataques de sus rivales en los compromisos que jugaron.

En cuestión de ideas para los delanteros, durante el primer semestre entre Jhon Freddy Pérez y Daniel Cataño se idearon la manera de jugar colectivos, se echaron el equipo al hombro y demostraron que cuando se juntaban, aparecían las ideas en el onceno ‘auriverde’. Lo bueno de este dueto ofensivo, fue que cuando Pérez desaparecía del compromiso, Cataño lo contagiaba con buena actitud en el terreno de juego y con eso hacía que volviera al partido. Cuando Pérez se fue para el Deportivo Cali, Cataño pasó a ser el líder en esta zona, pues de él siempre fue la respondabilidad en las ideas para los delanteros, con el paso del tiempo fue mostrando que la tarea no era fácil, pero terminó respondiendo de manera efectiva.

Foto: Vanguardia Liberal

Delantera 100% de calidad

Durante el primer torneo, Pablo Rojas fue a quien le correspondió hacer las veces de delantero, su velocidad y explosión en el ataque fueron las principales características del jugador creado en las divisiones inferiores de Real Santander. Cuando Rojas fue vendido a Uniautónoma F.C., llegaron los goles del Deportivo Cali con César Amaya y Víctor Zapata, Amaya procedente del Deportes Tolima y Zapata de Águilas Doradas, entre ambos anotaron 18 goles en el rentado nacional, César hizo 11 y Zapata 7. En los partidos del segundo semestre, Amaya apareció en momentos decisivos como ante América de Cali en cuadrangulares finales, él convirtió el empate del equipo leopardo.

Sin duda, Atlético Bucaramanga tiene merecido el ascenso a primera división, a lo largo del año fue el equipo que tuvo mayor regularidad en ambos semestres, se caracterizó por proponer juego en todas las canchas y siempre con una idea ofensiva. La jerarquía en el cuerpo técnico encabezado por José Manuel ‘Willy’ Rodríguez y Diego Alonso Barragan, hizo un plantel compacto en el terreno de juego, el cual se defendió bien e hizo las cosas bien en la ofensiva, sin importar la condición de local o visitante. 

Foto: Colprensa

Amor por la camiseta y compromiso por el objetivo

La manera en la que el ‘leopardo’ afrontó los compromisos del año, deja dos conclusiones: La primera es que todos los jugadores siempre estuvieron comprometidos por el ascenso y aunque en ocasiones no se jugó bien o falto un "centavo para el peso", siempre lo dejaron todo en el terreno de juego. El ascenso siempre fue el objetivo principal de toda la plantilla de jugadores durante todo el año, así estuviese lejos antes de disputar los cuadrangulares, nunca se perdió el horizonte que quiso el cuerpo técnico.