El Deportivo Cali se ha reforzado hasta los dientes, una inversión para llegar a ser protagonistas en todos los frentes. Es tan importante esta serie, que una eventual eliminación ante su rival de patio podría condicionar la continuidad del proyecto Mario Yepes. 

Los clásicos no se juegan, se ganan. Este será el condicionamiento para el equipo de Mario Yepes, que se armo hasta los dientes para lograr un gran trofeo. Ello no les permite ni el más mínimo resbalón, el verdiblanco debe ganar sí o sí.

El Cali es el obligado

El América no tiene una gran obligación, su objetivo es salir del infierno de la B y no le daría mucha importancia a la Copa Águila. Ello obligaría al Cali a ganar la serie, no es solo tema de objetivos, es el orgullo del equipo el que se pone en juego.

Mantener una idea de juego

El cuadro azucarero con la llegada de nuevos jugadores, debió cambiar su idea de juego. Ahora, el equipo de Yepes es un equipo de buen trato de balón, de elaboración de juego, con un intérprete como Mayer Candelo. Sin embargo, cuando no juega Mayer se nota la ausencia del número 17. El Cali se torna impaciente y quiere terminar las jugadas lo más pronto posible. 
El reto para Yepes, es hacer que el Cali juegue igual con o sin Candelo. Que sea aprovechada la jerarquía de hombres como Andrés Pérez y Abel Aguilar. Aunado a la capacidad y destreza de Fabián Sambueza y John Freddy Pajoy. Adelante sea Harold Preciado, José David Lloreda o Ronnie Fernández, se aprovecharan con contundencia del buen juego desplegado por el mediocampo verdiblanco.
A todo esto debe enfrentarse el Deportivo Cali, vencer al América es el objetivo número uno de los dirigidos por Yepes.