Muchas personas a lo largo de la presente Liga han criticado al cuerpo técnico del Medellín por su esterilidad a la hora de realizar cambios durante los partidos que puedan dar un nuevo aire al equipo cuando se viene abajo. En este partido, de manera poco convencional, Torres decidió revolcar la nómina titular. Tampoco se puede decir que levantó hasta la última piedra, pero sustituir a Vladimir Marín por Luis Tipton era algo impensado por muchos hinchas, al igual que el reingreso de Hernán Pertuz a la nómina titular por Diego Herner y la variante de Juan David Pérez por el creativo Daniel Hernández.

Claro, si a Medellín le hubiesen empatado al final, o en un peor caso, hubiera perdido, todos estarían reclamando las 'inconsistencias' del DT en la escogencia de jugadores, incluso algunos estarían pidiendo su cabeza, pero esta vez no fue el caso. Se ganó, al igual que otras seis veces en lo que va de Liga. 

Sin embargo, es muy poco lo que se puede resaltar del Medellín de hoy. En ningún momento del partido Medellín logró adueñarse completamente del balón y desplegar un fútbol ofensivo como se ha querido. El pequeño número de pases (256) que realizó Medellín durante todo el partido demuestra su incomodidad en el terreno de juego. Hernández, quien aparte de los goles buscó continuamente asociarse con los demás creativos, y González, salvando su valla en siete ocasiones, fueron los más destacados en el poco convincente equipo que se paró en Cúcuta. 

Para el próximo partido partido Medellín contará por fin con el alta de toda su nómina. Es posible atribuir algunos malos momentos futbolísticos a la ausencia de referentes como La Goma y Cristian Marrugo. Hoy el DT, para contrarrestar lo dicho, quiso probar variantes, oxigenar la nómina y mostrar un respaldo para con los que no son habitualmente titulares. Se debe valorar la actitud y el compromiso del cuerpo técnico frente al proceso, que a pesar de sus impugnables críticas, sustenta la tercera mejor campaña en los 101 años del 'poderoso'.