Tras la derrota el pasado miércoles frente al Junior de Barranquilla, el defensor del club capitalino, Oswaldo Henríquez, analizó y reflexionó sobre el juego que Millonarios hizo en la cancha.
El defensa central de 26 años aseguró que tras conseguir el empate frente al equipo tiburón se pudo haber mantenido ese resultado, pero que tras la expulsión de Luis Mosquera el partido se tornó difícil para ellos.
"La expulsión cambió todo el partido. Antes de eso, Millonarios tuvo muchas opciones de irse adelante en el marcador. Después nos tocó remar mucho contra la marea y eso es lo que pasa cuando uno arriesga", dijo Henríquez.
Tras la expulsión de Mosquera el equipo fue en busca de la victoria, generando opciones que no supieron aprovechar. Se notó un equipo desconcentrado y desordenado en la cancha que los llevó a la derrota.
"Uno cuando no tiene un buen arranque, después el margen de error se va haciendo mucho más corto. No estaba contemplado esta derrota en nuestras cuentas. Matemáticamente no nos deja bien ubicados y ahora nos toca remar mucho más contra la marea", afirmó Oswaldo.
Millonarios se encuentra en la posición 15 en la tabla de la Liga Águila con 11 puntos, sus eternos rivales como Santa Fe, está de tercero con 19 puntos, mientras que el Deportivo Cali es noveno con 15 unidades.
"A veces hay que ser inteligentes y saber que cuando no se puede ganar tenemos que guardar el resultado. Se vale la actitud, el ímpetu, pero con un equipo como Junior, con jugadores rápidos y habilidosos, a veces hay ser inteligentes".
Millonarios se medirá el domingo ante Boyacá Chicó, en condición de visitante. El equipo de Israel buscará conseguir los tres puntos para sumar en la tabla y meterse entre los ocho primeros.