Nacional necesitaba ganar para pasar, pero el inicio del encuentro dejó ver a un equipo colombiano que parecía jugando para perder: desconcentrado, nervioso, impreciso, inseguro y desubicado en el terreno. Los ataques de Vitória eran tenues, pero la defensa verde estaba tan paralizada que con poco el conjunto brasileño complicó al equipo de Juan Carlos Osorio.

Como parte de su filosofía, Nacional salió jugando en corto: de Franco Armani para Oscar Murillo, o el defensa que estuviera mejor ubicado. El equipo brasileño sabía eso y presionó cada salida con Dinei, Vinicious y Edno, sus hombres más adelantados, obligando a los defensas nacionalistas a despejar.

El armado de juego en la mitad de la cancha no existió para el equipo colombiano, como tampoco existió un filtro que impidiera la ductilidad en el ataque local. Farid Díaz y Daniel Bocanegra alternaron con Alejandro Bernal para hacer de volante contención, cada uno sin resultados importantes en su tarea de marca.

Sherman Cárdenas, el hombre encargado de crear, se vio incomodo gran parte del partido, vociferando con cada pelota perdida y descontento con sus deciciones y las de los demás. Así, el final del primer tiempo fue a los empujones para el visitante, sin ideas y con el desespero propio del que sabe que no hace lo correcto.

La otra cara

El complemento abrió con dos equipo más centrados, mejor ordenados en el terreno y pasivos a la hora de proponer. Tácticos. Para el equipo de Osorio entraron los hombre de Selección Colombia, Edwin Cardona y Alexander Mejía y se notó la diferencia.

Las líneas de ambas escuadras mantuvieron la paciencia y no hubo, hasta el minuto 25, nada relevante para el desarrollo del partido.

Luego de un tiro de equina, el segundo consecutivo desde la banda derecha, Bocanegra cazó un rebote en el área chica, luego de un cabezazo de Alexis Henríquez que se estrelló en el travesaño, y marcó el gol de la clasificación a cuartos de final de la Copa Sudamericana para Nacional.

Final a toda

Los último diez minutos del cotejo, y con un equipo colombiano que se había tomado confianza con el gol, fueron todo lo que no fue el partido durante los 80 minutos anteriores con equipos al ataque.

El conjunto de la visita pudo ampliar la ventaja con dos opciones claras en los pies de Cardona y Wilder Guisao, mientras que los dueños de casa exigieron a Armani con las acciones de Dinei, quien anotó un gol legitimo que fue anulado por una "posición adelantada".

El juego terminó animado y el tiquete a la siguiente fase fue para el conjunto colombiano, que accedió por segundo año consecutivo a los cuartos de final de la Copa Sudamericana donde esta vez se verá con César Vallejo de Perú.

Gol de Bocanegra: