Un año 2016 de ensueño, que continúa escribiéndose, vive el recientemente incorporado delantero verdolaga Miguel Ángel Borja. El increíble registro de 31 goles en 35 encuentros disputados en lo corrido de este calendario son prueba feaciente de su capacidad y desempeño.

Con solo 23 años y haciendo parte del proceso de Selecciones Colombia, el nuevo ariete del Verde Antioqueño no permitió espacio a especulación alguna. Ochenta y dos minutos en cancha le bastaron para que el hincha de Atlético Nacional entendiera su nombre como un sinónimo inequívoco de gol.

Por si fuera poco, se estrenó como lo hace aquel que promete escribir historia grande entre los grandes del balompié verdolaga: Con gol ante Sao Paulo FC, de visita en el mítico Morumbí y en plena semifinal de Copa Libertadores de América.

Los gritos de la parcial visitante rompiendo el silencio de casi 70.000 almas locales, fueron la banda sonora de la primera de 9 exclamaciones al cielo en agradecimiento por la oportunidad de inflar las redes con la casaca de su nuevo club. El segundo gol cayó ese mismo día y desde allí se perfiló como el indicado para vivir un idilio con la gente, difícilmente visto hacia alguien que llevara tan poco tiempo vistiendo los colores de la institución paisa.

Con el tercer gol, el Atanasio Girardot ya coreaba al unísono su nombre. Las miradas extasiadas y los rostros de júbilo no se hacían esperar, mientras propios y extraños observaban atónitos como una hinchada tan exigente, reconocía rápidamente las virtudes de un jugador tocado con el don del éxito. Cuatro goles en sus primeras dos presentaciones llenaron y sobrepasaron la expectativa hasta de los más optimistas.

Como si fuera poco, en su cuarto juego anota de nuevo, esta vez el gol decisivo en la final del certamen de clubes más importante del continente; Independiente del Valle la víctima. Atlético Nacional era campeón de la Copa Libertadores de América por segunda vez en su historia. Como no podía ser diferente: con gol de Miguel Ángel Borja.

No paró más. Diez juegos oficiales y nueve goles con el conjunto a rayas verdes y blancas de Antioquia hacen pensar en el hombre de Tierralta, Córdoba como un viejo conocido referente de la casa. Tanto que ya ha sido tentado en múltiples ocasiones por la amplia oferta extranjera para que empaque maletas y parta hacia otro destino. Su objetivo es uno: el Mundial de Clubes con Atlético Nacional.

Un caminar sólido, con gol ante Bolívar por la presente edición de la Copa Sudamericana, una anotación más ante Real Cartagena por Copa Colombia y un doblete en el último duelo frente a Patriotas por el mismo certamen; como recordatorio latente de que para celebrar sin perder detalle de cada uno de sus éxitos, no se debe parpadear.

Los otros 22 tantos los anotó con su club de procedencia, el del corazón del Valle del Cauca: Cortuluá. Registro no menor que le permitió convertirse en el hombre récord en cuánto a dianas en torneos cortos se refiere.

Miguel Ángel Borja es sin duda: El nombre del gol.