Cuando el amor por la camiseta no sólo se profesaba en las gradas sino también en las canchas de Sudamérica se instituía un torneo continental donde los campeones y luego los segundos de sus ligas se enfrentaban en un marco que entregaba la gloria al mejor del continente. 

En los albores de la década del ’60 cuando se disputaba la 3era edición del certamen, más específicamente en el año 62, Emelec hacía su primera aparición en la competición y se enfrentaba por segunda vez en torneos continentales a un equipo chileno, la Universidad Católica de Chile en esta oportunidad (anteriormente lo hizo por el Campeonato Sudamericano de Campeones 1948 ante Colo-Colo). 

Los Cruzados venían de ser campeones de Chile y Emelec ganó el titulo del año 61 cinco días antes de su debut por Copa Libertadores ante Millonarios bogotano que ganó 4 a 2. Emelec visitó a los de La Franja el 10 de Febrero y se llevó una goleada 3 a 0 con un juego desorganizado y falto de una homogeneidad colectiva. 

En la revancha en Guayaquil, que se disputó el 22 de febrero en el Estadio Modelo Guayaquil, el equipo Eléctrico fue contundente, rotundo y con un categórico 7 a 2 pulverizó al equipo Cruzado. En una noche copera mágica para Enrique Raymondi que se despachó 5 goles. 

Se volverían a cruzar por la Copa Libertadores de 1967 en la cual el cuadro Millonario visitó a la Católica y conseguía su primera victoria en condición de visitante en la historia del torneo. Con dos goles del manabita Jaime Delgado Mena vencieron 2 a 1 a los chilenos. En Guayaquil, al año siguiente, en 1968, Emelec perdió de local contra los Cruzados 1 a 2 y empató en su visita a Santiago de Chile.

La última vez que ambos bandos se enfrentaron fue en la pretemporada 2011 en el estadio San Carlos de Apoquindo en la presentación en sociedad del equipo chileno. El encuentro terminó con victoria para los locales con un gol a cero. El único tanto del encuentro lo marcó el Lucas Pratto cuando se jugaba el minuto 67.