El equipo de Burruchaga saltaba a la cancha con el trabajo realizado, desde el instante en que supieron que el equipo de Sampaoli era el rival de turno, empezaron un trabajo de seguimiento y estudio a la U, los partidos de visitantes en la Fase de Grupos, las debilidades en Quito, por lo cual se llevaron 4 goles, los lentos cubrimientos en defensa, en especial por la banda del capitán Pepe Rojas, la presión desplegada y salida de contra rapidísima, e incluso fue tal el estudio, que las constantes expulsiones de Sampaoli de las canchas sudamericanas, fue también tenido en cuenta.

Libertad hacía un juego en el que, para muchos el mejor volante central de Sudamérica, Víctor Cáceres, era el equilibrio del equipo, se apoyaba en Aquino y junto con la labor por las bandas de los interiores, Civelli y Ayala el ataque era más dinámico y rápido, en especial si se tiene en cuenta que Samudio, el lateral por la izquierda, también se sumaba al ataque, casi como un extremo. En todo Chile se sabe que para ganarle a la U de Chile, se tiene que correr más que ellos, son tan veloces y profundos en sus ataques que no es fácil hacer una labor de contención contra ellos. Por eso Gallegos y Henríquez sobresalen en el ataque azul, tienen buen juego y no son para nada torpes, además de una contención de 5 volantes, era obvio que con 9 volantes el partido se iba a concentrar en esa zona del campo.

Y el partido empieza con mucha intensidad, los dos equipos corriendo mucho y abriendo el juego para los volantes externos, con mucho oficio los laterales evitan las jugadas y el juego se traslada al medio otra vez, esta vez, ya casi en las 18 con 50 mts. La U de Chile subía mucho las líneas en especial a jugadas a balón parado, y gracias a ese riesgo Libertad aprovechó, cuando todo el equipo estaba presionando arriba, el Topo Cáceres recupera desde mitad de cancha y abre por izquierda a Núñez que recién se sumaba, atrae marcas y con taco lujoso lo deja por detrás a Civelli que sin pensarlo lo mete al área en un remate rasante, donde Cáceres quien empezó la juagada infla la red, 1-0 y Libertad pegaba primero.

La intentona de la U no se hizo esperar, y con Felipe Gallegos de extremo y sirviendo balones para quien pudiera llegar al área que cubriera Muñoz, y en unos de esas incursiones Gallegos elude a Bonet y envía el balón al centro del área casi cayéndose, en donde Henríquez impacta al esférico a un poco más de un metro de distancia de Muñoz que con reflejos casi felinos lo manda al tiro de esquina. Casi 4 minutos después, más exactamente a los 35', en otra riesgosa subida de líneas de la U, otra vez Cáceres recupera en el centro y lo manda con precisión para Samudio que se sumaba por izquierda y entrando al área dispara sin pensarlo dos veces, pero la reacción de Herrera rechazando el fortísimo disparo fue asombrosa, el reconocido "ufffff" resopló en todo el Nicolás Leoz.

El primer tiempo finaliza mermando la dinámica que tuvo todo el partido hasta aquí, la labor de los medios y de las veloces puntas quedaban para los segundos 45 minutos.

Recién hace sonar el silbato Ubriaco y la U sale con decisión para buscar el empate. Libertad mientras tanto empezaba a tocar, desde su arquero hasta sus delanteros, no rifaban el balón ni hacían pases innecesarios. Pero no era suficiente para tener a la U sin opciones, si había algo que tenían los de Sampaoli, era presión y precisión, el trabajo para recuperar el balón era increíble, y cuando Libertad pensaba que el partido lo tenía en la bolsa, se equivocaron, la U les quitó el balón y les empezó a tocar en sus narices. 

Con el gran control y manejo del balón que ejercían Marcelo Díaz y Charles Aránguiz, Libertad se empezó a sentir incómodo y confundido en su propia cancha. Por eso las jugadas en ese tramo del partido para los de Burruchaga, eran solo a balón parado, sin claridad y dejándole la iniciativa a la U. En una mala salida de Libertad, Gustavo Lorenzetti lo recupera y él mismo remata de zurda con un pequeño desvío de Bonet, la mete rasante al palo de la mano derecha de Muñoz, por más que se estiró, el remate lo cogió del otro lado y nunca llegaba. Lorenzetti hacía el 1-1 y un resultado increíble, porque Libertad de a poco empezaba a despertarse.

Con un gran trabajo táctico, el ingreso de Gamarra, el equipo paraguayo era más claro en llegadas y animaba a los demás a seguir y jugando y romper el empate. Libertad notaba a la U cansada y desgastada y se vislumbraba a la misma U de la derrota en Quito hace semanas, por eso le volvió a robar el partido y la metió atrás. La ahogó con llegadas y remates, pero la figura de Herrera se agrandaba y el gol no llegó. Un gran responsable de mantenerse el empate fue el capitán azul, Pepe Rojas, con cubrimientos, y precisas marcas. No era más y el match terminaba 1-1. Todo de cara a lo que se pudiera hacer en Santiago.

Y para un poco más de picante para la vuelta, todo aquel equipo que eliminaba a Libertad en Libertadores, fue campeón. Así que la U tiene esa pequeña chance.