Liverpool arrancó el Clausura ganándole a Defensor y pintaba para pelear por los puestos de prestigio, sin embargo, se fue desdibujando y de sus últimos tres encuentros solo había podido sacar un punto en su encuentro ante Wanderers, ya que luego perdió con el actual líder de la tabla anual, Danubio y con River Plate.

Recién el domingo, los de la cuchilla pudieron reencontrarse con la victoria y lo hizo ante un rival que no es sencillo, que venia teniendo buenas actuaciones en todo el campeonato. Los dirigidos por Eduardo Favaro no solo consiguieron llevarse los tres puntos, sino que golearon al conjunto de Florida como visitantes y mantuvieron el quinto puesto en la tabla anual.

Los negriazules tuvieron una gran efectividad al plasmar su superioridad futbolística,convirtiendole cuatro goles a un gran equipo. Chevantón abrió el marcador a los 17 minutos de la primera parte con un gran control de balón y definiendo de manera estupenda ante Nicola Pérez, dándole mayor tranquilidad al equipo. Quince minutos más tarde apareció Iván Moreno y Fabianesi para ampliar la diferencia en favor deLiverpool. Así se fue el primer tiempo, con dominio en las acciones por parte del conjunto de Belvedere, mostrando sus superioridad futbolística en el marcador, con un merecido 0-2 hasta ese momento. 

Corrían 61 minutos de partido cuando el juez del encuentro pita penal en favor del conjunto local, que en los pies de su goleador Júnior Arias iba a tener la posibilidad de descontar y ponerse en partido. El joven delantero no falló y la coloco contra el palo izquierdo del arco defendido por el guante de oro del mundial sub 20, Guillermo de Amores, cumpliendo con la inexorable ley del ex.

Este gol no fue problema para el equipo de Lolo Favaro, que siguió haciendo un buen partido, a pesar del descuento, ya que un minuto más tarde aparecería una de las figuras de los negriazules, Papa Pezzolano, que colocaría el 1-3 que hizo estériles los intentos del conjunto de Raúl Möller.

A los 84 minutos, y para terminar de liquidar a El Tanque, el joven delantero, Rodrigo Aguirre marcó el 1-4 final, con el que Liverpool se puso en zona de Copa Sudamericana y recuperó la sonrisa, que había perdido en las ultimas tres fechas.