Tras dejar atrás la derrota ante Argentina, la “Celeste” tenía que pensar en un solo objetivo: el pasaje de ronda. Para ello, no tenía que perder con el rival de turno, ya que, podría quedar afuera de la competición; por su parte, Paraguay, había conseguido clasificar la fecha pasada y se esperanzaba con obtener los 3 puntos hoy para quedar hipotéticamente primero en el grupo.

Sin lugar a especulaciones y colocando un equipo ofensivo, los dirigidos por elMaestro” Tabárez siguieron la línea mostrada en los primeros minutos de los encuentros anteriores: poca creatividad (no jugó Nicolás Lodeiro, el armador de juego), conexiones entre los sectores de la cancha de forma errónea (el “Tata González, desconcentrado, y Carlos Sanchez no podía avanzar ya que los jugadores del elenco “guaraní” se lo impedían) y los delanteros no tenían participación con el equipo (muy desorientado Edinson Cavani e indecisos Diego Rolán y Abel Hernández). Dicho esto, el primer período, hasta los 30 minutos aproximadamente, fue aburrido, ya que antes de que se cumpla ese tiempo, José María Giménez conectó con su cabeza un córner enviado por Sanchez y marcó la ventaja en el marcador. Uruguay aprovechó las pocas chances de gol que tuvo, y el juego aéreo fue una clave exitosa.

A pesar de ello, el equipo de Ramón Diaz no se quedó atrás: intentó jugar por las bandas (Edgar Benitez inquietó la banda izquierda), Néstor Ortigoza se desarticuló del pobre juego hasta ese momento mostrado y se asoció correctamente con Lucas Barrios y Nelson Haedo Valdez, éste último desperdició el empate porque, en el área penal y tras un tiro de esquina, golpeó el balón por encima del travesaño, y además, los defensores impidieron los ataques esporádicos del rival.

Cuando parecía que el ganador se iba al descanso con el resultado a su favor, Édgar Benítez envió un tiro de esquina al primer palo y ahí apareció, desmarcándose de gran manera, Lucas Barrios, quien sorprendió a los defensas, incluido el arquero Muslera, con su certero cabezazo. El empate, hasta ese momento, era justificado porque ninguno de los dos equipos había peligrado con frecuencia las áreas y el juego mostrado no era el esperado, ante un partido de gran importancia para ambos.

La segunda parte fue de mucha fricción, áspera por momentos (Ortigoza y Barrios fueron reemplazados por molestias musculares) y un equipo que mejoró en cuanto a la colectividad y aproximación hacia la portería: Uruguay. A partir de los ingresos del “Cebolla” Rodriguez y Stuani, tuvo más profundidad, creación de juego,  más movilidad por los sectores de ataque y sólo le faltó el gol (Stuani, en dos oportunidades, y Cavani, los protagonistas de que el resultado siguiese igual). Los minutos finales mostraron lo mismo que predominó en los 45 minutos iniciales, a pesar de la única chance que tuvo Paraguay, en la que Muslera desvió un remate esquinado de Derlis González.

El empate depositó a los dos equipos en la siguiente ronda. El elenco de Tabárez acumuló 4 unidades, quedó como mejor tercero y jugará los cuartos de final de la Copa América el miércoles ante Chile, el local, mientras que el rival de los dirigidos por Ramón Diaz, de buen torneo, no está definido, ya que restan jugarse varios partidos y se sabrá, recién, mañana.