El conjunto bohemio consiguió un empate agónico en su cancha y celebró como si hubiera conseguido la victoria. Una tarde excepcional del golero Jorge Bava había opacado la buena tarea ofensiva del equipo dirigido por Gastón Machado, pero en una de las últimas jugadas del partido, los locales—que se encontraban en inferioridad numérica— lograron batir la valla rival y así hacer justicia, rescatando un punto en el primer partido de la temporada.

En la etapa inicial Wanderers dominó a su adversario y no pudo abrir el marcador gracias a la notable actuación del portero de Liverpool. Intentos varios de Cabrera y de Gastón Rodríguez —quien falló un tiro penal en el minuto 22— fueron contenidos por el ex arquero tricolor.

El conjunto del ingeniero Juan Verzeri inquietó a través del accionar de Paulo Pezzolano, quien fue el hombre de campo más lúcido del elenco negriazul. La oportunidad más clara para la visita en la primera parte la tuvo Junior Arias, pero su remate fue rechazado por el golero Leonardo Burián.

En el complemento el ritmo de juego bajó notoriamente. 

El partido tomaría otro rumbo en el minuto 66 tras la expulsión de Peinado en Wanderers, quien vio la tarjeta roja tras una dura entrada sobre Cantera. Pocos minutos más tarde, el recién ingresado Diego Ferreira sacó un latigazo desde lejos que se coló arriba en el arco local y decretó la apertura del marcador. 

El partido se volvió intenso y trabado en su recta final. 

Los bohemios lucharon e intentaron llegar a la igualdad. Ya en tiempo adicionado, Cristian Ferreira cobró un polémico penal de Andrés Rodales sobre Gastón Rodríguez, que desató las protestas de los jugadores visitantes. El volante zurdo del elenco del Prado se encargó de ejecutar el penal —el segundo de la tarde— y esta vez no falló. 

Bava fue figura pero cayó sobre el final. Inclusive, en el minuto 95 le tapó un mano a mano a Javier Cabrera

Era injusto que Wanderers se fuera con las manos vacías en su primera presentación. Mereció encontrar el gol mucho antes, pero al menos logró igualar el encuentro aún cuando el trámite le era desfavorable.