El combate estrella de la velada celebrada anoche en el Staples Center de Los Ángeles acabó antes de lo previsto, en el segundo asalto, cuando el árbitro Pat Russel estableció que Bernard Hopkins no podía seguir peleando después de una polémica caída en la que se lesionó el hombro.

Hasta la incidencia Hopkins (56 victorias -32 KOs- 6 derrotas y 2 empates), de 46 años, había mostrado un boxeo lento, cediendo el protagonismo al aspirante Chad Dawson (31-1, 18 KOs), que conseguía mover al veterano púgil a través del cuadrilátero gracias a acertadas combinaciones y a un mayor ritmo de combate. Ante esta situación, Hopkins aprovechaba cualquier posibilidad de agarrarse a su contrincante y ralentizar el ritmo de la acción.

Fue en uno de estos agarres cuando Dawson apartó a Hopkins ayudándose con el hombro, empujando al hasta entonces campeón; que caía al suelo. Podría haber sido una caída más, pero Hopkins ya no se levantó aquejado de una lesión en su hombro izquierdo. Ante esta situación, el juez decidió dar la victoria a Dawson por nocaut técnico, al entender que no se había producido falta en la caída y que Hopkins no podía seguir boxeando.

Ninguno de los dos púgiles estuvieron conformes con los sucedido. Para Dawson "Hopkins tiene la culpa de lo que ha pasado, él fue quien se echó sobre mí y forzó la caída que luego generó en la lesión de su hombro, por lo tanto él fue el único culpable que no siguiese la pelea y los aficionados pudiesen ver más boxeo”, mientras que para el ya excampeón proclamaba a los cuatros vientos que su caída había sido falta y no una caída legal.

A partir de ahí solo queda hacer suposiciones. Puede ser que Hopkins, que se estaba viendo superado por Dawson en el inicio del combate, exagerara su caída y fingiera la lesión con el fin de provocar que el árbitro descalificase a Dawson, y puede también que la acción del finalmente vencedor no fuera del todo válida.

Como resultado, Dawson recupera la corona que ya lució en 2007, y deja a Hopkins sin un título que le dió el record de ser el boxeador de mayor edad en conseguir ser campeón del mundo. La posibilidad de una revancha está abierta, aunque tendría que ser porque el WBC la decretara como necesaria ante la polémica suscitada, ya que el actual campeón, Chad Dawson, ha dejado muy claro que de ningún modo le dará la oportunidad.