El serbio y número uno del mundo, Novak Djokovic, optará el domingo a su octavo título de Grand Slam. El primero lo consiguió exactamente siete años, precisamente aquí en Melbourne, un estadio donde el serbio ha vencido hasta en cuatro ocasiones este "major" y espera poder hacerlo una quinta vez, algo que nadie ha conseguido desde la era Open. Novak Djokovic sufrió para derrotar al suizo y vigente campeón del torneo, Stanislas Wawrinka, precisamente su verdugo en el pasado año por 7-6(1), 3-6, 6-4, 4-6 y 6-0 en un partido que se prolongó hasta las cuatro horas aproximadamente de partido.

En toda la historia, sólo Roger Federer en activo presenta los mismos trofeos en la pista dura de Melbourne que el serbio. Djokovic con la victoria de hoy se sitúa con 49 victorias, a una sola victoria de convertirse en pentacampeón del Open de Australia.

Enorme intensidad en pista

El partido marchaba a toda velocidad desde el inicio. En los primeros quince minutos de encuentro, el marcador ya lucía un empate 3-3, gracias a la solidez en el servicio desde ambos lados de la pista, donde no había concesión alguna al rival. Hasta que Wawrinka dio un paso adelante. Subió el listón de agresividad y rompió el pacto de no agresión. Se intercambiaron reveses punzantes y derechas mortales. El suizo aprovechó su primera opción para quebrar el servicio de Djokovic en el séptimo juego y el serbio no dudó en devolverlo, en blanco, en el octavo. 100 por cien de efectividad en oportunidades de break. No había conseguido saborear Wawrinka lo que es romperle un juego al serbio, el primero que pierde en este Open de Australia.

Djokovic se llevó por 7-1 el tie break

Ambos tenistas iban a conseguir mantener sus respectivos saques y iba a llevar al primer set al decisivo tie-breal. En el desempate, Djokovic iba a sacar todo su arsenal tenístico, con derechas, revés, saques directos, sin duda un verdadero espectáculo por el que Wawrinka nada pudo hacer. Se llevó el serbio el desempate por un parcial de 7-1 letal, en un desempate donde el serbio jugó lo mejor que sabe.

El segundo set parecía que Wawrinka volvía a la pista decaido por el tie break perdido ante Nole, el suizo a punto estuvo de perder el saque en el primer juego del segundo set, pero supo recuperarse y con dos revés cruzados marca de la casa evitó que el serbio pusiese ventaja en el segundo set. Sin embargo, un error no forzado del serbio, el más doloroso: una doble falta, concedió la ventaja al suizo en el sexto juego del segundo set (2-4). Volvía a repetirse la situación de la manga inicial. Pero esta vez los latigazos de revés de Wawrinka sí castigaron a su rival para consolidar su ventaja. Stanislas Wawrinka conservó su saque para apuntarse el parcial (3-6).

Comenzó los buenos golpes y el espectáculo

Novak Djokovic veía como había aparecido la versión más brillante y espectacular del suizo, con esos revés a una mano que sin duda son de lo mejor del ranking ATP. Wawrinka amenazó el serbio del serbio en el primer juego del tercer set hasta en dos ocasiones, pero el helvético consiguió sacar orgullo y coraje para evitarlo y así lo hizo. No solo contuvo el mejor momento en el partido del suizo, sino que fue capaz de esperar su oportunidad para aprovechar la primera opción de rotura que se le presentó en el segundo juego, poniendo tierra de por medio en el marcador (3-0). Lejos de venirse abajo, Wawrinka recuperó la desventaja con un nuevo break, esta vez en blanco, y devolvió el parcial de tres juegos (3-3). Parecía que iba a volver a ser un partido épico, pero la verdad es que ambos tenistas no estaban jugando a su mejor nivel, a Wawrinka ese primer servicio que tanto le ayuda no le servía y lo acabó pagando rompiéndole el servicio Djokovic en el décimo juego y apuntarse el tercer set por un marcador de 6-4.

A pesar de los buenos números en el servicio que durante los días anteriores habían logrado ambos tenistas, especialmente en los cuartos de final, el resto seguía marcando la pauta en el partido, y es que tanto Nole como Stan no se mostraban muy seguros con su servicio. Ambos tenistas se repartían breaks hasta que Wawrinka decidió parar y apuntarse este cuarto set por 4-6. Una vez más como ya sucediese en el segundo set, Stanislas volvía a remontarle el set al serbio Novak Djokovic y esta vez para forzar el último set. En los cuatro últimos partidos disputados entre ambos tenistas en un Grand Slam se llegó al quinto set, hoy volvió a ocurrir.

Quinta vez consecutiva que van al quinto set

Comenzó el quinto y último set y el número uno del mundo, Novak Djokovic se puso 3-0 arriba en un principio de set espectacular, donde ese servicio que flaqueaba en los últimos sets volvía al ritmo de saques directos y ace. Wawrinka, siempre a remolque en el marcador, ya no tuvo fuerzas para una tercera remontada. El serbio le endosó un duro 6-0 que sin duda quedará marcado en el recuerdo de todos los aficionados que visitaron el Rod Laver Arena. Los daños colaterales de la derrota de Wawrinka ante Djokovic pasan también por la posición en el ranking. Por primera vez en un año, el helvético abandonará el 'top 4' mundial para caer al noveno puesto en beneficio de Andy Murray, flamante finalista. El tenista de Belgrado, por contra, que defendía 360 puntos de 2014, es cada vez más líder del circuito masculino. Ahora mismo, antes de la final del torneo, le saca 3.000 puntos a Roger Federer y 6.500 puntos a Nadal, al que podría sobrepasar en más de 7.000 el próximo lunes, distancia jamas habida entre ambos.

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Le espera en la final Andy Murray

Djokovic ya tiene rival para la final del Open de Australia y ese no es otro que Andy Murray, que venció en el día de ayer al checo Tomas Berdych: "Andy y yo nos conocemos desde que teníamos doce años. Fue la primera vez que jugamos, es bonito jugar otra vez una final de un Grand Slam contra él", afirmó Novak, que conservará el número uno suceda lo que suceda en la final. Mucho más se juega Murray que, en caso de levantar el trofeo de campeón, rebasaría en el ranking al español Rafael Nadal.