El jugador de las Águilas del América, Miguel Layún, consiguió su segundo campeonato y de paso un lugar en la memoria y el corazón de la afición azulcrema, al ser él quien levantó la décimo segunda copa del cuadro capitalino.
Dicen que lo que no te mata te fortalece y ese es el caso de Miguel Layún, quien tras ser fuertemente criticado tanto por la prensa como por la afición americanista, logró salir adelante a base de esfuerzo y dedicación para adueñarse de un lugar en el cuadro titular, en la historia y en la memoria del americanismo.
Layún ha reconocido ser americanista desde niño, pero como jugador llegó al conjunto de Coapa en el año 2010, después de emigrar a Italia y no tener éxito. El jugador veracruzano jugó 10 partidos en su primer torneo (Bicentenario 2010) militando con el América.
En su segunda campaña, Layún consiguió un lugar en el 11 titular y jugó todos los partidos que el equipo disputó. En ambos torneos, el número ‘19’ de las Águilas anotó un gol.
Para el Clausura 2011, de nueva cuenta disputó todos los juegos, pero en esa campaña no convirtió.
La crisis para Layún llegó en el Apertura 2011, en dicho torneo no tuvo participación con el cuadro azulcrema, quien por ese entonces era dirigido por Carlos Reinoso y después por Alfredo Tena, tras una serie de malos resultados que arrastraba el equipo desde dos años atrás.
Con la llegada de Miguel Herrera al banquillo azulcrema para el Clausura 2012, Miguel Layún volvió a tener minutos. Herrera lo conocía luego de su paso en el Veracruz. El entrenador le dio voto de confianza y lo dejaba sumar minutos, sin ser titular.
Ese año en las redes sociales comenzaba a circular el hashtag “#TodoEsCulpaDeLayún”. La gente no se cansaba de criticar el desempeño del jugador y esa era su manera de expresar el descontento de que formara parte de la institución americanista. Pero pese a no ser del agrado de la afición, Layún no se rindió y siguió trabajando para afianzarse y conseguir la tan ansiada titularidad.
En 2013, lo logró. Miguel Herrera le dio la oportunidad de jugar 14 partidos como titular en un torneo que fue de ensueño para todo el americanismo, pues se consiguió un campeonato luego de 8 años de sequía.
Layún pateó el penal decisivo que le dio el título a las Águilas, ahí se marcó un antes y un después en su carrera y logró la empatía con la afición.
En ese mismo año, fue convocado a la Selección Mexicana para jugar la Copa Oro. También fue parte de los seleccionados que jugaron el repechaje ante Nueva Zelanda para ir al Mundial de Brasil 2014.
El 2013 fue un gran año para Miguel Layún, pero el destino le tenía preparado algo mejor. Luego de conseguir el pase a Brasil 2014, el oriundo de Córdoba, Veracruz, fue uno de los 23 jugadores que viajaron al país sudamericano para disputar la Copa del Mundo, en donde México fue eliminado en octavos de final por Holanda.
Para el Apertura 2014, Antonio Mohamed, nombró a cuatro jugadores capitanes del equipo y entre ellos estaba Miguel Layún. El ‘19’ del América jugó 1,355 minutos y anotó 6 goles, en el que hasta este momento ha sido su mejor torneo vistiendo el azul y el amarillo.
En este torneo, el cordobés fue pieza fundamental y aunque las lesiones estuvieron presentes, nunca se rindió y esperó su regreso para continuar aportando.
El 14 de diciembre, Layún cerró con broche de oro su 2014 al ser capitán del equipo y levantar la copa número 12 para el Club América. Atrás quedaron las críticas, ahora solo quedan los aplausos y el reconocimiento para un jugador que demostró que querer es poder y que a la adversidad siempre hay que mostrarle buena cara.