En estos 100 años el América recibió a brillantes jugadores extranjeros. En las primeras décadas del siglo fueron españoles e ingleses, entre quienes se destacaron William Heyder y Luis Regueiro. Vendrían los argentinos en los cincuenta y los brasileños en los sesenta, con figuras como Emilio Fizel y Vavá. En las últimas décadas nos deleitamos con chilenos y uruguayos, entre los que destacaron Cesilio de los Santos e Iván Zamorano. Sin duda, los últimos años, han pertenecido a una nación; Ecuador.

Ítalo Estupiñán fue el 1º ecuatoriano en jugar con América

Tras anotar ante Querétaro, Michael Arroyo firmó el gol 100 de los ecuatorianos en el América. Una cifra impensada en los inicios de este siglo, pues la historia de los jugadores ecuatorianos en la escuadra azulcrema se resumía apenas a un nombre; Ítalo Estupiñán. El melenudo delantero, llegado al América a finales de los setenta, había contribuido con una decena de goles. Tras ese breve episodio parecía que la dirigencia azulcrema había dejado en el olvido a Ecuador.

En 2007 la llegada del mediocampista Luis Saritama trajo de nuevo la bandera tricolor a Coapa, pero los resultados fueron desalentadores. Apenas un gol y un pobre rendimiento hacían suponer que la combinación entre americanistas y ecuatorianos no volvería a darse.

Christian Benítez es el máximo anotador ecuatoriano con América.

Todo cambio en julio de 2011. La llegada de Christian Benítez transformó la relación entre Ecuador y el cuadro azulcrema. No fue un amor a primera vista, es más, los primeros meses fueron complicados. 52 goles y un enorme pundonor en cada jugada cambiaron la historia. ‘Chucho’ se metió en la lista de máximos goleadores americanistas y en el corazón de la tribuna. Por sobre todo, mostró el sello de un futbol que comienza a revolucionar Coapa; alegría y osadía.

Esa es la frase que ha impuesto con su futbol Michael Arroyo, el hombre del momento en América. Con 21 goles en su historial águila, ‘Micky’ se ha destacado por ser un jugador atrevido, capaz de tomar las situaciones más tensas como un momento de inspiración frente al marco. A menudo se le reprocha su inconsistencia, pero Arroyo ha sabido responderle al equipo en momentos cruciales. Sus goles en finales de Liga y Concacaf, además del más reciente en los festejos del centenario, dan prueba de ello.

El despuntar de Arroyo, junto con el fugaz paso de sus compatriotas Narciso Mina y la reciente llegada de Renato Ibarra, han llevado a los ecuatorianos a sumar 100 goles en América. La cifra no es cosa menor, pues ya se acercan a los 103 goles colombianos o los 110 uruguayos, países que han importado una mayor cantidad de jugadores al América (8 y 19 respectivamente, por tan solo 6 ecuatorianos). No cabe duda que América ha traído el gol desde la mitad del mundo.