90 minutos bastaron para reflejarse la enorme diferencia que existe entre la Liga MX y la Bundesliga, una de las mejores Ligas del futbol mundial. En Nueva York se enfrentaron dos de los equipos más importantes de México y Alemania respectivamente, sin embargo, la escuadra teutona impuso desde el comienzo su superioridad sobre el cuadro mexicano y derrotó con relativa facilidad al Rebaño, a pesar de que  la diferencia en el marcador no fue tan abismal.

Como se esperaba, el partido arrancó con los alemanes apoderados del esférico, fieles a su estilo, practicando su tan peculiar estilo de juego donde predomina la circulación y el buen trato al balón. Bastaron solamente 10 minutos para que la disparidad entre ambos conjuntos se viera plasmada en el tanteador, puesto que el Bayern München le puso número a la casa gracias a la anotación del peruano Claudio Pizarro, quien aprovechó un córner ejecutado por Frank Ribéry para rematar con la cabeza el cuero y así incrustarlo al fondo de la redes, batiendo al guardameta José Antonio Rodríguez.

Guadalajara intentó responder pero era clara su inferioridad pese a que el campeón de Alemania no contaba con varias de sus máximas figuras. El eje de ataque lidereado por Ángel Reyna, Omar Bravo y Aldo de Nigris no logró inquietar a la zaga rival, a diferencia de la ofensiva teutona comandada por Frank Ribéry, Robert Lewandowski y Claudio Pizarro, inclusive el artillero sudamericano tuvo una oportunidad para incrementar la ventaja pero su disparo pasó apenas rozando el poste izquierdo de la cabaña rojiblanca. 

Ya para la parte complementaria el táctico del chiverío, Carlos Bustos, modificó su sistema táctico y realizó algunos cambios que beneficiaron a su equipo, ya que logró nivelar el desarrollo del encuentro y las Chivas mostraron una cara más ofensiva en comparación con lo ofrecido en los primeros 45 minutos; los ingresos de Sergio Nápoles y Carlos Fierro ayudaron a que los tapatíos generaran más llegadas de peligro.

Precisamente la opción más clara del Guadalajara se originó hasta el 80' mediante los botines de Sergio Nápoles, quien desde el costado izquierdo sirvió para el delantero Carlos Fierro dejándolo completamente solo dentro del área, el Güero bajó la redonda con el pecho y disparó de pierna zurda pero el cancerbero Tom Starke desvió oportunamente el envío del mexicano impidiendo la igualada.

Esta acción obligó al Bayern a conservar nuevamente el balón y tratar de agotar la mayor cantidad de tiempo posible para quedarse con el triunfo y así fue, los dirigidos por Pep Guardiola se quedaron con la victoria en un duelo de mucha utilidad para ambos cuadros. De esta forma, el saldo de las Chivas frente a equipos europeos en esta pretemporada fue de un empate y una derrota, recordando que hace unos días igualaron ante el Swansea City de Inglaterra igualmente en tierras norteamericanas.

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Sobre el autor
Jesús Barrientos Espitia
Editor y corresponsal. Jefe de las redacciones: Cruz Azul y Santos Laguna.