La onceava estrella 2,853 días después

Están por cumplirse ocho años de sequía en el seno rojiblanco. Pues el equipo tapatío no ha ganado un solo título de liga desde aquella tarde mágica en el Estadio Nemesio Diez. VAVEL México te llevará de regreso en el tiempo para revivir el último campeonato del rebaño sagrado en el Futbol Mexicano.

La onceava estrella 2,853 días después
Foto: Archivo
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Por Carlos Avilés

Están por cumplirse ocho años de sequía en el seno rojiblanco. Pues el equipo tapatío no ha ganado un solo título de liga desde aquella tarde mágica en el Estadio Nemesio Diez.

Poco queda de aquel plantel espectacular de Chivas, que logró colarse a la fiesta grande por la puerta de atrás y salió de ella en hombros. Un Guadalajara que deslumbraba por su manera de jugar. Aplastando a sus rivales.

El camino a la gloria

Antes de entrar de lleno a la pelea por el título. El equipo tapatío tuvo que hacer una escala en el Puerto Jarocho para enfrentarse a Veracruz en el repechaje. Los dirigidos por José Manuel de la Torre salieron airosos del juego de ida. Luego de imponerse 1-2 al 'Tibu' gracias a los goles de Diego Martínez y Alberto 'Venado' Medina.

Para la vuelta, todo fue un festín rojiblanco. Pues el Rebaño Sagrado se impuso 4-0 al equipo de escualo en una gran actuación de Adolfo Bautista. Un autogol de Lucas Ayala, Sergio Santana, Alberto Medina y el 'Bofo', fueron los anotadores.

Un Guadalajara que deslumbraba por su manera de jugar.

Ya en la liguilla, el rebaño tuvo que enfrentar una inmensa prueba de fuego. Se tuvo que medir al líder general de la competencia, Cruz Azul. En el juego de ida, el chiverío dio una gran exhibición y venció al conjunto celeste dos goles a cero con tantos de Omar Bravo y Adolfo Bautista.

Ya en la vuelta, el conjunto tapatío llegó más relajado a la capital y supo llevar el partido. El encuentro terminó empatado a dos tantos, lo que le daba el pase al equipo rojinblanco. Dejando fuera al Superlíder.

Logró colarse a la fiesta por la puerta de atrás y salió de ella en hombros.

Para las semifinales, el equipo tapatío tuvo que medirse ante uno de sus más acérrimos rivales, el América. Teniendo que llevar sobre su espalda, aquella lejana final que el equipo azulcrema se llevó pasando por encima del Guadalajara.

La ida se realizó en el Estadio Jalisco ante un lleno espectacular. No todos los días se ve a los dos equipos más grandes del futbol mexicano peleando en la fase final del campeonato. Todo era perfecto para que se viviera una noche mágica.

La primera mitad fue muy cerrada. Ningún equipo quería ceder. Sabían que cualquier error, sería fatal. Pero para la parte complementaria todo cambió; el rebaño se fue al frente por vía penal gracias a un magistral cobro de Ramón Morales. Minutos más tarde, Omar Bravo sellaría el triunfo.

En la vuelta no pasaría mucho, partido trabajado por Chivas para no perder la ventaja y unas Águilas que se deseperaban conforme transcurría el tiempo. Al final, Guadalajara avanzaría a la final y pasando por encima de su odiado rival.

Un final emotivo

Luego de lograr lo impensable, Guadalajara estaba de nueva cuenta en una final del Futbol Mexicano. Ahora el rival era Toluca. Un equipo que sin hacer mucho ruido, ya se estaba metiendo entre los más ganadores del balompié azteca. Una nueva historia estaba por escribirse.

El partido inició con polémica, ya que temprano en el juego, Omar Bravo logró evadir a la defensa choricera y quedó de frente al marco de Cristante, pero este se lanzó sobre el jugador, derribando al jugador en el área y cortando el avance. Todo el mundo se dio cuenta del penalti, menos el árbitro central del encuentro.

A pesar de ello, el Rebaño Sagrado jamás se dio por vencido y ante los gritos de "Chivas, Chivas", lograron anotar antes de que finalizara la primera mitad. El máximo artillero, Omar Bravo Tordecillas adelantaría al chiverió haciendo explotar al Coloso de la Calzada Independencia.

Todo parecía que el rebaño se llevaría nuevamente la ventaja al juego de vuelta, pero en la recta final del encuentro, Bruno Marioni logró emparejar los cartones a pase de Vicente Sánchez, dejando la moneda en el aire.

Una nueva historia estaba por escribirse.

Un escenario mágico espera a ambos conjuntos. La 'Bombonera' de Toluca presentó un lleno espectacular. Había más playeras rojiblancas que escarlatas. Pero el ambiente era inmejorable.

El juego dio inicio en el Nemesio Diez y los locales de inmediato mostraron que no se dejaban espantar por la camiseta que estaba en frente de ellos. Bruno Marioni volvió a repetir la dosis y le daba la ventaja al cuadro choricero apenas pasados los primeros quince minutos del encuentro.

La primer mitad terminaría con el equipo mexiquense con la ventaja y unas Chivas que no encontraban como meterse en el partido. El descanso le vino bien a los rojiblancos, quienes a los pocos minutos de iniciado el complemento, el 'Maza' Rodríguez se levantó en lo alto para rematar un servicio de Ramoncito y poner el empate en la 'Bombonera'.

El equipo tapatío se creció tras el empate y ante los gritos de aliento de su afición, se volcó al frente en busca del triunfo. La magia aparecería en el 'Ángel' de las Chivas para darle su onceava estrella.

El rebaño insistía en llevarse el título en el tiempo regular. Pues no querían volver a pasar por lo ocurrido hace unos años atrás, en donde el chiverío llevó el cotejo hasta la tanda de penales y terminó por entregar el título.

Un destello iluminó el infierno, cuando Alberto Medina desbordó por la banda izquierda, pero fue arrinconado por José María Cruzalta, el 'Venado' no tuvo más remedio que retrasar el balón en donde aparecería un 'Ángel'.

Mientras el balón rodaba hacia los linderos del área, el 'Bofo' Bautista se preparaba para impactar el esférico de zurda. Su disparo salió cruzado y con ello logró vencer a Cristante.

El Estadio Nemesio Diez explotó y Bautista corría mirando hacía el cielo y gritando "Mamá...mamá". Pues el camiseta 100 del rebaño, tenía poco de haber perdido a su señora madre. Adolfo no aguantó y rompió en llanto, mientras sus compañeros lo abrazaban y gritaban el gol.

El 'Chepo' supo llevar los últimos minutos. Sacó a jugadores como Medina y Bautista para meter a jugadores de medio campo hacia atrás y tratar de guardar el resultado. La fórmula funcionó y el silbante finalizó el duelo, un pitido que indicaba el regreso del máximo ganador en el balompié nacional.

Después de esa noche mágica, salieron del club jugadores importantes en el título como el mismo capitán, Oswaldo Sánchez. Lo que provocó mucha frustración en la afición rojiblanca. A pesar de ello, el equipo no bajó mucho su juego estuvo, literalmente, a dos segundos de pelear por el Bicampeonato.

Siguieron saliendo jugadores del club y el equipo se fue desmoronando poco a poco. Constantes cambios de técnicos y directivos. llevaban al rebaño en picada. Quizá, nadie imaginaba todos los problemas que le traería a la postre.

Siete años y nueve meses después, Guadalajara regresará a la escena donde consiguió levantar un trofeo por última vez. Aunque esta vez llega en circunstancias muy distintas y que no son acostumbradas en una institución que alguna vez fue grande y daba temor con una simple camiseta.