Dicen que el tiempo lo cura todo, y un año después, la relación Chivas y Marco Fabián parece que buscará retomar donde se quedó para el bien de ambos.

El Club atraviesa una situación muy complicada con el tema del descenso rondando Verde Valle a diario, y así seguirá hasta que el andar de las jornadas transcurra en el Clausura 2015, ya sea para bien o para mal.

Guadalajara necesita de todas sus herramientas disponibles para borrar la mala imagen de los últimos años, retornar a los primeros planos futbolísticos, clasificarse a la Liguilla y buscar alcanzar el escalafón que durante décadas le perteneció: el del equipo más ganador de México.

Una de las cartas fuertes con las que José Manuel de la Torre quiere dar giro de timón al presente tapatío es Marco Fabián de la Mora, quien después de un año de exilio con Cruz Azul, todo indica volverá club que lo vio nacer.

Mucho se especula que el futbolista no desea volver a ponerse esta camiseta, y prueba de ello es el mensaje que publicó en su cuenta oficial de Twitter (“Será hasta el día 28 cuando haya información oficial y definitiva sobre dónde jugaré el próximo año”), sin embargo, es momento de que todas las partes dialoguen y busquen el bien común, porque el equipo necesita de Fabián, y viceversa.

¿Qué puede aportar Marco Fabián?

La calidad del mediocampista lo avala, generador de futbol que ha tenido lapsos muy interesantes durante su carrera, mismos que ya le llevaron a ser parte de la Selección Mexicana que acudió al Mundial 2014, sin embargo, el regalar ese talento a cuenta gotas parece no ser suficiente en este momento. Tanto Chivas ruega por ver la mejor versión del volante, como el mismo futbolista debería de pensar en explotar sus virtudes -de una vez por todas- si es que conserva la ilusión de dar el salto a las ligas europeas.

Junto a Isaac Brizuela, Giovani Hernández, Carlos Fierro, Omar Bravo y Erick Torres, 'Marquito' tiene suficiente talento alrededor para jugar a la pelota, cumplir su función de generador o volante ofensivo y gravitar en la última zona del campo, esa que los tapatíos han sufrido con creces en los últimos semestres.

Buena parte de la carrera de De la Mora puede depender del Clausura 2015. Una buena participación le revalorizaría, poniéndole nuevamente en la mira del Tricolor para los compromisos a medio año, y que le pueda significar la visoría de algún club del Viejo Continente.

De continuar como hasta ahora, el nacido en Guadalajara verá esfumada una de sus últimas opciones por trascender en el balompié azteca, quedando como muchos otros: en una mera promesa.