Ante un poco más de mil aficionados, el Rebaño propinó el primer golpe de cara al partido del domingo contra Leones Negros. 

Las Chivas fueron a meterse a la casa del rival, su anterior casa; el mítico Estadio Jalisco. Lo hicieron arropados por su gente, que presenció entre cánticos el entrenamiento de este viernes de los rojiblancos.

Guerra en redes sociales 

El partido inició en las redes. Primero fue Chivas, que convocó a su afición a inundar el Jalisco el domingo, inclusive, lanzó una promoción para los que asistan ese día tengan beneficios para el duelo que sostendrán en la Jornada 4 ante Pachuca. El chiverío lo hizo mediante la leyenda "La grandeza del Jalisco es nuestra". Los Leones, por su parte, respondieron con el hashtag #MiCasaNoEsTuCasa, creando disputas en las redes entre los aficionados de ambas escuadras. 

Leones Negros - Chivas

El domingo se acerca, y lo hace con rapidez, ilusionando a ambas aficiones, que esperan que los dos equipos se partan el alma dentro del empastado. Es la guerra por mantener la división, la categoría, la dignidad, la gloria. Y aún existen memorias de las batallas de antaño entre Leones y Chivas, y esas memorias vienen llenas de rivalidad, de odio deportivo, y del ingrediente recién adherido; el no descenso.

Lo de hoy en el Estadio Jalisco, fue un golpe de autoridad, y digo de autoridad porque Chivas sabe que tiene convocatoria, y fue a meter afición a la casa del vecino, con un mensaje claro; Guadalajara es territorio Chiva. Es cierto que los partidos se juegan en la cancha, pero, lo que pasa fuera de ella puede inclinar la balanza.

Los jugadores rojiblancos sienten desde el partido pasado otra vibra, una nueva comunión con su afición, un renacer de las glorias que guardan esas rayas, una nueva oportunidad de seguir siendo los más queridos de todo México. Hoy, en un simple entrenamiento, quedó claro eso, que el Guadalajara es y seguirá siendo uno de los equipos más populares del país, a pesar de sus últimos años tan oscuros, tan vergonzosos, tan mediocres.