Tras la brillante actuación que tuvo en le Jornada 1 del presente torneo, el paraguayo, Roque Santa Cruz, renovaba las ilusiones cementeras y desde el inicio se perfilaba para ser el alma en el ataque de celestes; no solo como delantero centro, sino como creador de juego por sí mismo. La Jornada 2, por el contrario, no le dio la oportunidad de refrendar su buen inicio y, más bien, dio paso a una prolongada espera por verlo regresar a las canchas, tras una lesión que se alargó más de un mes y que generó suspicacias en más de uno, por el mal manejo en el interior médico del equipo.
Antes tal situación, el ex Manchester City se manifiesta frustrado y entiende que la afición cruzazulina también lo esté y ya se haya interrogado al respecto, dudando de su compromiso con la institución. Más allá de eso, el goleador justifica a los aficionados y sabe que el único lugar para despejar dudas, será la cancha:
"Hay unas ganas de ver a Cruz Azul campeón, hay muchas ganas de ver a los jugadores que van llegando y yo estoy frustrado por eso, por no jugar. Me imagino que la gente también lo estará, así que es entendible lo que digan, pero la única manera que tengo de mejorar lo que la gente piense es jugando".
La lesión de Roque se añade a una considerable lista de situaciones médicas que ponen en duda los primeros veredictos médicos del club. Lo que parecía una lesión que iba alejar al guaraní tres jornadas, terminó alejándolo siete y aún no hay certeza de que el jugador se encuentre en condiciones de iniciar.
Por lo pronto, con el inminente regreso de Santa Cruz, será interesante ver quién será el sacrificado. Alemão, de a poco, demuestra que tiene mayores condiciones de las que muchos esperaban; no obstante, jugando la misma posición que el mundialista, parece tener una labor complicada para sustentar su titularidad en los próximos encuentros.