Era el año de 1994 y con tan sólo 19 años, aquel 'Niño' lleno de carácter, fuerza y liderazgo debutaba con el equipo que lo vio nacer, Cruz Azul. Lleno de hambre de gloria y triunfo, a Paco Palencia se le caracterizó por ser un batallador nato dentro del campo de juego, era su sello, siempre tenía en mente el triunfo, nunca bajó los brazos y fue así como llegó a consagrarse como un símbolo de nuestro fútbol. 

A pesar de su corta edad compartió el balón a lado de jugadores como Carlos Hermosillo y Julio Zamora; fue campeón con aquel cuadro cementero en el invierno del 97', último título de 'La Máquina' hasta la actualidad. 

Tras la salida de Carlos Hermosillo de Cruz Azul en 1998, Francisco Palencia tomaría la capitanía del equipo, la cual, dejaría hasta el 2001. Sin duda el Mundial de Francia 98' lo hizo madurar como jugador. Palencia ya no era más un niño. Luego de vivir esa experiencia en una Copa del Mundo, sus goles llamaban más la atención, siempre líder, nunca inseguro, así como una personalidad única que lo hacían diferente al resto.  

Fue una pieza fundamental en el año 2001, en aquella Copa Libertadores de América, en el que marcó 9 anotaciones y anotar el único gol antes Boca Junior en la final, donde para desgracia de los celestes perderieron en penaltis. 

El también llamado 'Gatillero', además de militar en Cruz Azul, también lo hizo en el Espanyol de Barcelona, Guadalajara, Chivas USA y Pumas. Tuvo una actuación destacable con la Selección Mexicana, en la cual disputó dos Mundiales: Francia 98' y Corea-Japón 2002. 

El ex-jugador e ídolo mexicano obtuvo tres títulos de Liga, uno con Cruz Azul y dos con Pumas de la UNAM en el Clausura 2009 y 2011. Juan Francisco Palencia anotó 130 goles, 89 de ellos portando el color celeste

El 28 de noviembre de 2011, se estaría anunciando su retiro del fútbol profesional. Sin duda, Palencia no sólo es ídolo celeste o de un sólo equipo, sino del fútbol mexicano, y es que siempre se le recordará en el terreno de juego como un delantero sereno, un fuerte roble a la disputa de un balón o como 'El Niño' que se colgaba de la red de la portería para celebrar un gol.