Los sábados de futbol volvieron a la gente leonesa, que contenta recibía a su Club León y al Veracruz de Carlos Reinoso, quien recibió un emotivo homenaje previo al inicio del encuentro de la jornada 2.

En las tribunas, como siempre, el ambiente era inmejorable, principalmente provocado por la gente de los de Arriba, que sacaba a relucir las banderas. Adentro, la tensión previa a un partido también estaba presente, pues en la cancha estaban dos escuadras que venían de ganar y que tenían sed de alargar su invicto.

El pitazo inicial de Erick Yair Miranda dio por automático el contagio de la tensión en los futbolistas hacia los presentes, quienes con gritos desahogaban cada equivocación de los que veían acción.

Durante los primeros minutos, los de Pizzi habían mostrado conciencia en que la propositiva del trámite del encuentro tenía que ser propia y mediante dos aproximaciones se confirmó. Primero, Navarro, quien era uno de los más destacados, recorrió toda la banda derecha para enviar un disparo potente en la media luna, que si bien fue tapado por la defensa, formó parte de una brillante jugada.

Peña le siguió con un disparo de volea en una ‘velita’, mientras Montes cometía algunas equivocaciones en cuanto al tiempo, pues dejó ir varias ocasiones de contragolpe por pases desacertados. El ‘Tibu’, esperaba atrás y a medida de que fue pasando el tiempo empezaba a presionar con fuerza a la zaga rival.

Fue precisamente eso, la presión, la que provocó un error de Darío Burbano atrás de la media cancha que terminó en tragedia para el local; en un tradicional movimiento de recorrido por todo el ancho de la cancha, el cafetalero fue recargado por Furch y terminó cediendo el balón para Andrade en el círculo central, éste no desaprovechó y pasó a Juan Albín, quien vio adelantado a Martínez y no dudo en picarle el balón para inaugurar el tanteador con un soberbio tanto al 20’.

Furch insistió en la siguiente acción con un peligroso testarazo que pegó en la publicidad de la Liga a un costado de la portería, en una clara llamada de atención para los Esmeraldas, que tenían que responder a como diera lugar y así lo intentaron.

El tiempo daba su marcha y los verdes quisieron empatar el partido, pero no lo lograron al menos en la primera mitad, aunque sí estuvieron cerca de hacerlo, pues pasada la media hora, Elías Hernández mandó un trallazo que sacudió el travesaño del arco de Melitón.

El pitazo final, que despedía la primera mitad con ventaja hacia los Tiburones, se había llegado entre la molestia e impotencia de los asistentes al ver como caía su conjunto.

Para la parte complementaria, el trámite del juego se empezó a hacer bastante alentador para León con el manejo de la pelota, que a medida de que corrían las acciones, le daba la oportunidad de llegar al área. En una de esas, Darío Burbano apareció para cerrar una buena jugada colectiva a centro de Elías Hernández, que sí remató con potencia más no con colocación, lo que dejó ir la que pudo ser del empate.

La consistencia ofensiva de los Panzas Verdes los llevó a generar bastante peligro en el área de Melitón, quien antes de los 15 minutos de haber arrancado con el complemento, tenía un penal en su contra tras una mano justo al límite de la línea de gol por parte de Jesús Paganoni a remate de Guillermo Burdisso.

Precisamente al 15’, la ocasión para igualar los cartones estaba en los pies de Mauro Boselli, quien sorprendentemente, erró su disparo, en contribución de la buena atajada de Hernández, que está haciendo territorio de atajadas al bajío.

Apenas después del ingreso de Miguel Sabah al campo en lugar de Velarde, los Panzas Verdes se salvaron del segundo en un remate de Albín. Posteriormente, Carlos Peña intervino con una genialidad en un tiro de esquina, enviando el balón de taquito por encima de Melitón al poste del arco, para que en segunda instancia y en la justa raya de anotación, el caribeño empujara sin marca para decretar la igualada al 68’.

La insistencia rápido le dio frutos a los Esmeraldas en un córner cobrado por Luis Montes, que fue rematado por Guillermo Burdisso ante la pésima salida del guardameta escualo; esto al 75’. Los más de 29 mil presentes se habían prendido auténticamente con la diana de la ventaja, mientras que el ‘Maestro’ intentaba responder enviando a Aníbal Zurdo al terreno de juego.

El paseo de la pelota, que le daba emoción a la tribuna, también le otorgó la marcación de un penal al cuadro de Juan Antonio Pizzi, en una acción en que Peña filtró para Sabah y éste disparó antes de la potente barrida de Cervantes, que casi lo quiebra.

Llegó entonces la oportunidad de reivindicación para Mauro Boselli al 37’ de la segunda parte, quien con un excelso cobro al ángulo, hizo estallar a los suyos con el 3-1, aprovechando de paso la ventaja numérica sobre los de Reinoso.

Siguió la mata dando, como se dice, y para mata, apareció el ‘Matador’ argentino, Boselli, para concretar su doblete y meter el 4-1 al 84, en una tremenda jugada individual sobe la derecha por parte de Navarro, quien dejó en bandeja de plata la anotación con un tiro cruzado.

El cotejo se despidió con la salida entre aplausos de Carlos Peña por Miguel Ibarra, además del tradicional canto de ‘Caminos de Guanajuato’.