Después de la eliminación del Clausura 2016 a manos de los Tuzos del Pachuca, en León hay dolor, decepción, tristeza y sobre todo rabia. Así lo dijo Jesús Martínez Murguía, el presidente de este club, quien tomó la situación de esta manera, más allá de que su adiós al torneo haya sido frente al cuadro que preside su padre.
Con una inconformidad por el arbitraje, el apodado ‘Chuchín’ externó el sentir que le deja la derrota ante el equipo hidalguense, aunque también señaló que tiene orgullo, orgullo por la forma en que sus jugadores encararon el partido, con tanta garra, de saber además que una nueva final en su mandato estuvo a punto de darse.
“Enojado, triste, decepcionado pero a la vez orgulloso porque mis jugadores dieron todo dentro del campo, fueron pequeñas circunstancias que nos dejaron fuera de la final, pero Pachuca es un digno finalista. Hoy nos tocó perder, pero estoy orgulloso de mis jugadores, de mi afición, de que hicimos un buen torneo y de que quedamos a nada de una final”, comentó.
Reiterando que, pese a que la eliminación se la propinó Pachuca, donde incluso se formó en su etapa de futbolista y es el equipo de toda su familia, Martínez Jr. externó que toma eso como si hubiera sido ante cualquier otro rival; de todas formas, la tristeza y decepción no se va, mucho menos la rabia.
“Es como cualquier otro equipo, obviamente te da rabia quedar fuera de una final, estoy realmente triste y decepcionado, pero orgulloso del equipo y que dejó todo dentro del campo”, añadió.
Finalmente y, al igual que algunos de sus jugadores –como es el caso de Mauro Boselli, ‘el Presi’ lamentó la falta de criterio de Jorge Isaac Rojas Castillo, el silbante que llevó a cargo las acciones duelo ante Pachuca este domingo, considerando que, si lo hubiese tenido, habría señalado el penal de Murillo, que fue “del tamaño del estadio”.