Tras el empate en el Morelos entre Morelia y León el técnico Enrique Meza habló con los medios en conferencia de prensa.

Para Meza sus dirigidos tuvieron dificultades para adaptarse al campo de juego, además del ritmo: “Daba la impresión de que el equipo no lograba adaptarse a la cancha, estaba muy rápida, perdimos muchos balones, nos precipitábamos demasiado, en el segundo tiempo hicimos mejor las cosas”.

‘Ojitos’ aclaró el porqué Millar no estuvo convocado, además minimizó la ventaja que tiene León por el gol de visitante.

Millar se volvió a resentir, no es grave pero preferimos guardarlo, estamos igual que si fuera 0 a 0, entonces realmente el 1 a 1 no es definitivo y tenemos que mejorar porque no fue buena nuestra actuación el día de hoy”.

Añadiendo, Enrique dijo que sus jugadores siempre muestran actitud para ganar los encuentros, sin embargo puntualizó un error frecuente durante el partido.

Siempre lo quieren hacer bien, pero en ocasiones tiraban la pelota sin saber si la iban a sacar bien, arrancaban a correr y la pelota ya estaba con el rival, tenemos que mejorar eso”.

Para Meza el volumen de juego disminuyó, lo que afectó en el desarrollo del partido: “No tuvimos un buen volumen de juego, mismo que ya habíamos conseguido, el partido de hoy fue la excepción, allá tenemos que mejorar, la cancha de León es una cancha buena y nos va a permitir corregir”.

Después, Meza señaló lo que sus jugadores deben hacer antes del choque del sábado cuando todo se defina: “Ahora el equipo tiene que descansar e hidratarse, pronto va a llegar el otro juego, tenemos que ir a jugarnos el todo por el todo”.

No hay que precipitarnos porque podríamos no conseguir nada”.

Para cerrar ‘Ojitos’ detalló los puntos más peligrosos del conjunto dirigido por Fernando Tena y la propuesta que Morelia tendrá en el juego de vuelta.

A partir del manejo de juego se puede ampliar el volumen, los 3 de adelante y el medio campo de León es muy peligroso, hay que tratar de llegar a la zona para terminar jugadas, porque hay ocasiones en que el rival recupera la pelota y se convierte en contragolpe”.