Luego de más de un año en remodelación, este miércoles se llevó a cabo la reinauguración del dos veces mundialista, Estadio Cuauhtémoc.

Con el actual campeón de Argentina, Boca Juniors, como invitado de lujo, el Puebla de la Franja regresó a casa luego de verse obligado a jugar como local en el Estadio Universitario BUAP.

Para este cotejo, el Gobierno del Estado de Puebla, entregó todas las entradas de manera gratuita, por lo que la afición comenzó a copar las gradas del Coloso de la Colonia Maravillas desde varias horas antes de que comenzara el encuentro.

El festejo inició con una interpretación de las bandas musicales de los Centros Escolares Niños Héroes de Chapultepec y José María Morelos y Pavón, así como con la interpretación de Miguel Ángel Rodríguez, ex participante de un conocido reality show musical.

Con un cuadro combinado con jugadores titulares y suplentes, Puebla dejó claro desde el principio que este partido era únicamente un trámite, un festejo, pues el encuentro importante se disputará este viernes en Querétaro, donde se jugarán su pase a la Liguilla.

Un testarazo de Matías Alustiza tras un servicio de Adrián Cortés, fue el medio por el que los locales abrieron el marcador sobre el conjunto xeneize. Las modificaciones no tardaron en llegar y ambos estrategas dieron minutos a todos sus jugadores; lejos de ser un partido espectacular, lo mejor se vivió en la tribuna, en una noche con gran ambiente y que al medio tiempo, se paralizó para admirar los fuegos artificiales.

Para el complemento, Puebla tuvo para incrementar su ventaja en el marcador desde los once pasos, pero el autor del primer gol camotero, erró en el cobro de la pena máxima mandando su disparo a la tribuna. El encuentro culminó con la mínima ventaja a favor de la Franja, que en palabras de sus jugadores, solo piensa en obtener los tres puntos ante Gallos Blancos, rival al que enfrentarán en la última fecha del torneo Apertura 2015.