Buenos resultados dejó el comienzo de la campaña para el Puebla. Iniciadas las acciones de Liga y Copa MX, La Franja logró manifestarse desde el principio como un equipo que tenderá al buen trato del balón y tendrá interés de manifestar su juego prolijo en cualquier cancha. En este primer par de encuentros, la calificación del equipo parece ser aprobatoria por unanimidad y, a partir de acá, solo se esperaría un ascenso en su nivel, mismo que permitiera que lo que se viene planeando a nivel táctico, rindiera frutos más tangibles conforme el campeonato vaya tomando forma.

A continuación, repasemos lo que dejaron los partidos en el Estadio BBVA y Corregidora:

Punto valioso ante Rayados

Como se comentaba previo al debut, la primera encomienda del Puebla en el torneo se veía bastante complicada. En una de las canchas de mayor imponencia en México, ante el subcampeón y con su plantel atiborrado de figuras, parecía que los Camoteros iniciaban con pocas probabilidades de sortear con éxito su partido de la primera fecha del Apertura 2016.

Un parado sólido en Monterrey fue una grata sorpresa

Grata sorpresa nos llevamos los aficionados del Puebla, al ver cómo el equipo se fue a parar con solidez a la cancha de Monterrey y, por buenos lapsos del encuentro, logró meter a Rayados en su juego. Si bien sería arriesgado decir que los Camoteros merecían más que ese punto que al final sacaron, lo cierto es que no se vieron superados por un equipo con un trabajo en conjunto más fuerte, tomando en cuenta que el proyecto del Puebla con Ricardo Valiño recién va iniciando y el de Antonio Mohamed lleva ya más de un año de haberse puesto en marcha.

Muy temprano en el encuentro, La Franja se vio abajo en el marcador. Un penal por parte de Pablo Míguez, rápido tornó negro el entorno y hacía suponer lo peor. Muy por el contrario, a partir de ahí, el juego de Puebla lo único que hizo fue crecer y, aun cuando podría comentarse que el gol del empate tuvo como gran cómplice al cúmulo de desatenciones de la defensa de Monterrey, la realidad es que a esas alturas Puebla ya merecía equilibrar la balanza, resultado de su buen trato de balón y su interés por crear oportunidades.

Al final, el empate deja buenas sensaciones. Detalles entendibles que mejorar, evidentemente; sobre todo, considerando que Cristian Campestrini se volvió a manifestar como la figura al participar dos veces de manera notable, en lo que habría implicado el 2-1 favorable a Monterrey y, por supuesto, también considerando que la expulsión de Edwin Cardona pudo ser factor en beneficio del Puebla y es una circunstancia que no siempre surgirá.

Habremos de ver la evolución del once inicial prototipo. Más allá del penal, Míguez parece prometer en zona de recuperación. No es querer hacer alusión a la tan trillada (y no siempre certera) ‘garra charrúa’, pero el uruguayo parece tener condiciones para imponer respeto en su zona. De la misma manera, Alexis Canelo inició con el pie derecho, al anotar el gol del empate. Ahora se esperaría ver su dominancia con el balón en los pies, pues en él se pretende que recaiga una buena responsabilidad en la generación de llegadas y, como lo comentaremos al abordar el partido de Copa, parece que su competencia con Franco Arizala será interesante.

Además de los mencionados, buena calificación podría llevarse el grueso de quienes jugaron. Regresó a la titularidad Carlos Gutiérrez y asistió, ‘Campe’ (como sabemos) es un fuera de serie y solo quedaría esperar que este torneo jugará las 17 fechas. A partir de ahí, a todos los demás jugadores que se presentaron ya se les conoce, se sabe qué esperar de ellos y cumplieron bien. Queda en duda, de nuevo, la valía de Álvaro Navarro. La intención, en definitiva, no es ensañarse con él; la situación es que, conforme corran las fechas, será importante evaluar su desempeño, pues sus dividendos hasta el momento siguen dejando qué desear.

El primer triunfo de Valiño ante Querétaro

Sin dejar de lado que los partidos de Copa son más volátiles en cuanto a nivel, considerando que no todos los equipos gustan de encararla con la suficiente intensidad, es importante resaltar que Puebla se vio muy bien en su debut copero y dominó con claridad a Gallos Blancos en su cancha.

De entrada, es de reconocerse lo vasto que parece el plantel en varios sectores del campo. Ver en el ‘torneo alterno’ a gente como Franco Arizala, Damián Escudero y Matías Alustiza, habla de que Puebla tiene una importante cantidad de recursos ofensivos para dar rotación a sus jugadores. De la misma manera, en zona baja, el buen debut de Damián Schmidt y la conocida calidad de Edgar Dueñas, pintan como para que tampoco se padezca tanto en defensa.

Una buena impresión dejó la primera victoria de Vaiño

La Franja se vio muy bien. Incluso el primer gol, bien podría ejemplificar lo que el equipo muy probablemente pretende. Carlos Orrantía, que venía haciendo lo que quería en su banda derecha, tocó para Arizala que, luego de sacarse al defensa de encima, sacó un gran cambio de juego que Escudero solo tuvo que dormir para que Alustiza definiera con la calidad que se le conoce. Participación eficiente en conjunto. Un golazo.

Puebla siguió con el mando de las acciones y, principalmente, podrían destacársele dos movimientos tácticos muy interesantes en el segundo tiempo, ya cuando el marcador era favorable por 2-1. Recién cayó el gol de Querétaro, Valiño sacó a Arizala para meter a Patricio Araujo. Aun así, muy por el contrario de intentar defender a ultranza su marcador, inmediatamente después sustituyó a Jerónimo Amione por Eduardo Pérez y volvió al frente. Ahí parece comenzar a vislumbrarse de qué va Valiño con su propuesta. Meter a un defensa no implicó renunciar al ataque y el arco contrario siguió siendo el objetivo. Como aficionado, esas cosas se aplauden.

Tanto se aplaude eso, como se aplaude la dupla que parece empezar a tomar forma entre ‘Edu’ y Alustiza. Es verdad que ‘Edu’ anduvo poco fino en este partido, pero la cantidad de veces que se combinó con Matías hace ilusionar, pareciendo promisorio (sobre todo en Liga) verlos a los dos juntos en acción.

Puntos valiosos en la que, hay que decirlo, no dejará de ser una competencia un tanto mediocre por el formato de competencia en donde de tres participantes en el grupo, pasan dos. Al final, eso al Puebla poco le tiene que importar. Lo cierto es que en el palmarés sigue contando y, con la gran tradición con la que el equipo cuenta en este competición, sus aficionados queremos ver que aspire a ella.

Se viene el debut en casa ante Tijuana

Y para los que aún andaban dudosos con respecto a su presencia en el Estadio Cuauhtémoc este torneo, parece que el inicio del Puebla nos ha invitado a todos a ir, esperando que La Franja siga su paso ascendente en el torneo. Claro está que con dos juegos no se da un veredicto. No obstante, es lo que podemos analizar del Puebla hasta el momento y, por lo pronto, ha sido adecuado.

Se viene Xolos que también tuvo buen debut en su casa la semana previa. Por todos es bien conocido que su ataque está sustentado en el talento de Dayro Moreno, que debutó con doblete ante Morelia. Buena prueba para la defensa poblana que parece tendrá cambios y contará con Schmidt que se vio bien en su debut con el Puebla, en Copa.

Al ataque será interesante ver cuáles son las variantes. Muy probablemente, veremos a Alustiza de regreso a la titularidad en lugar de Navarro. Y de la misma forma, se esperaría que Escudero se volviera más relevante, tomando en cuenta que el torneo pasado demostró cosas interesantes, dando la esperanza de verlo más minutos y, principalmente, siendo más determinante como titular; considerando que lo mejor que mostró anteriormente, lo dio entrando de cambio pero nunca iniciando los juegos.

Ahora solo queda esperar los tres puntos. En casa, Puebla siempre tendrá obligación de ganar y, si Xolos sigue con su tendencia gitana de torneos anteriores, no sonaría para nada descabellado lograrlo.