Los errores cuestan muy caro y más en el futbol. Este domingo, Alejandro Palacios vuelve a quedar en deuda con la afición universitaria siendo el gran villano del partido. Pero al principio del encuentro, nadie sospecharía que él sería el causante de que los universitarios volvieran a perder puntos como locales.

Pumas de la UNAM llegaba al encuentro con 11 unidades y una esperanza de saltar a los puestos importantes. Mientras tanto, Chiapas FC sabía que un buen resultado afuera de su cancha los mantendría en puestos de liguilla y firmes para avanzar más en una tabla general, como siempre, irregular de principio a fin.

Guillermo Vázquez volvió a repetir alineación con Romagnoli en la media cancha y Leandro en la lateral. Al silbatazo inicial, estos dos jugadores fueron los motores para que López o Herrera tuvieran balones. Mientras tanto, el cuadro de Chiapas tenía en su mejor fortaleza la pegada de gente como Vuoso o Andrade, que avisaron en los primeros minutos.

A pesar de esto, el primer tiempo fue un vendaval de jugadas peligrosas en sólo 10 minutos para después apaciguarse durante el resto de este espacio de tiempo. Lo más destacado fue la lesión de Leandro, que tuvo que ser sustituido por Ludueña a los 29’. El mismo conjunto de Sergio Bueno tuvo que hacer un cambio forzado al salir Paredes por un fuerte golpe y entrara Julio Nava, quien después sería fundamental para el cuadro de la selva.

Para la segunda mitad, Pumas empezó diferente y con garra. Y fue al 46’ que Herrera pudo prolongar a Ludueña, quien inteligentemente, sirvió un balón al espacio a Sosa que frente al portero fue letal. El 1-0 hacía respirar a la hinchada que seguía desconfiando pese al resultado a favor.

Al 70', un segundo latigazo de pases rápidos al espacio le quedó al canterano Herrera, que no se desesperó y definió a pierna izquierda de Jiménez. Un nuevo gol que podría dar paso a más tranquilidad. Pero los universitarios han dejado ver a través del torneo que en lo que más han fallado es en resguardar un resultado.

Y la debacle empezó al 80’ cuando dejaron sólo al novato Isaac Díaz, quien definió de forma excelsa sin que la defensa auriazul pudiera hacer algo. Vázquez mandó un movimiento defensivo al sacar a Sosa por Espinoza, pero el cobro de un tiro libre después de una barrida innecesaria de Verón dejaría ver al villano del partido.

Nava cobró al 90’ y Palacios buscó retener el balón con las manos, pero la fuerza de este hizo rebotar el mismo para que se le fuera de las manos y, a pesar de que pegó en el arguero, el guardameta no pudo sacarla de su portería e incluso la empujó más. Un nuevo resultado malo para el Club Universidad que sólo tiene derrotas o empates en su estadio. Ahora se puede señalar quién fue el culpable, aunque el equipo sabe que el resultado no cae únicamente en un sólo hombre.