Apropiarse de un puesto en la titularidad de los Pumas de la UNAM nunca ha sido sencillo, y menos en la zaga de la segunda década del siglo, pues la última línea de los auriazules ha contado con nombres tan importantes para el equipo, como Dario Verón, Efraín Velarde, Efraín Juárez y Marco Antonio Palacios. 

Un joven nacido en las costas del Golfo de México, en Quintana Roo, que lleva por nombre Luis Fuentes, se ha ganado el aplauso de los aficionados y la confianza de los directores técnicos para cubrir una de las bandas del Club Universidad Nacional

Nunca se ha caracterizado por ser un jugador que acapare los reflectores ni sea drámatico. Su buen fútbol, la velocidad, el marcaje y la capacidad de ir al frente hasta la línea de fondo, lo han convertido en un referente inamovible de la lateral felina desde hace casi cinco años, hasta la fecha. 

Durante el Clausura 2015, Luis Fuentes jugó en todos los partidos del torneo, e incluso fue titular en las 17 jornadas en las que participó el equipo.  La madurez del defensa también se refleja en la disciplina, ya que a diferencia de torneos anteriores, y a pesar de lo que podría pensarse por la posición que ocupa dentro del terreno de juego, el zaguero no recibió ninguna tarjeta a lo largo de la competencia y siempre estuvo en la disputa del esférico para contactar a los medios e ir al frente, además de que nunca rehuyó del contacto fuerte por el esférico.

En los partidos donde su presencia más se recuerda a lo largo del certamen es en contra de Santos, Puebla y Morelia, todos ellos jugados en el Olímpico Universitario y con resultado en favor de los locales por diferencias mínimas, en parte gracias al actuar defensivo de Fuentes, que pudo anular a jugadores como Calderón, Noriega y Morales.