En una época donde las grandes figuras que se producían en la cantera puma escasean, existen algunos jugadores que dan la cara para demostrar que el talento no se ha agotado, y que solo hace falta que los “diamantes sean pulidos”. Para muestra de lo anterior, José Carlos Van Rankin, uno de los últimos grandes valores producidos en las inferiores del club, demostró que puede cumplir en su posición natural, pero que además puede ser habilitado en otra zona del campo y rendir de la mejor manera.

Una muestra más de la gran madurez que ha tenido el joven lateral derecho, pues acumuló 1354 minutos de los 1530 posibles durante el torneo. Los números anteriores fueron obtenidos de los 17 partidos que jugó el Club Universidad, pues solo se ausentó en uno debido a su única tarjeta roja recibida (Tigres, Jornada 8), y en los partidos restantes inició como titular. Además de solo en 2 ocasiones fue sustituido, la primera ante los Gallo del Querétaro en la jornada 1 y la segunda ante las Chivas en la jornada 3. Lo anterior denota la confianza que tiene depositada el técnico Guillermo Vázquez en Van Rankin.

En el renglón disciplinario, José Carlos acumuló 2 tarjetas amarillas, la primera contra los Rojinegros del Atlas en la jornada 4 y la segunda ante la Franja del Puebla en la jornada 11, además de la ya mencionada tarjeta roja ante los Tigres de la UANL.

Por otra parte, pudo aportar en la última zona felina al anotar su único tanto de la competencia ante los Leones Negros de la UdeG en la jornada 12.

No cabe duda que la contribución e importancia de Van Rankin va en aumento, y a pesar del mal torneo que en general tuvo el equipo, poco a poco se consolida como uno de los jugadores más importantes en el esquema de Vázquez Herrera, lo cual aunado a sus buenas actuaciones con los representativos menores de la selección nacional, lo ubica como una opción para el futuro del técnico de la selección mayor, Miguel Herrera.