El inicio del partido fue muy flojo, aburrido, sin ninguna emoción. Ambos conjuntos se trababan en demasía en el medio campo, y no llegaban a la portería contraria.

Cándido Ramírez, quien se fue lesionado en la segunda mitad, fue el primero en poner cierto peligro en el encuentro, luego de un disparo desde las afueras del área del Cruz Azul Hidalgo, pero su tiro pasó desviado.

Monterrey como que quería apurarse y antes de que se terminara el primer lapso la tuvo mediante Joaquín Hernández, pero el trallazo del mediocampista rayado fue sacado en la línea de gol y se disipaba así la chance para el Monterrey.

Para el segundo periodo el equipo del Norte puso orden y pisó el acelerador. De hecho, fue de manera muy rápida en el complemento cuando se fueron arriba en la pizarra, ya que Erikson Llanes disparó de media distancia y con mucha complicidad de Oscar Bucio, el meta celeste, el balón se incrustó por primera vez en el partido a las redes.

Rayados se animó mucho más en el choque y comenzó a dominarlo totalmente. Después de varios avisos, Othoniel Arce acrecentó la ventaja regiomontana con un golazo desde las afueras del área, pegándole a la bola con la pierna izquierda y llevando la anotación muy bien colocada al rincón de la portería.

Los de Jasso Hidalgo no mostraron mucha resistencia durante el segundo tiempo y hasta cierto punto fue una victoria muy cómoda y fácil para unos Rayados que supieron buscar y atacar en el momento justo.

La Pandilla se pondrá líder de su grupo dentro de la Copa MX con diez unidades, mientras que el conjunto filial de la máquina celeste se quedará con dos puntos dentro del sector.

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Sobre el autor
Carlos Iván Ramirez
Periodismo en la UANL de Monterrey Nuevo León. Redactor de Vavel.com