Mucho ruido y pocas nueces de Tigres, que no pudo ante la categoría de River Plate en la Final de Ida de la Copa Libertadores y todo terminó en un 0-0 que pone la llama de la gloria regia endeble en el torneo.

Ante un Estadio Universitario siendo una caldera de pasiones, los felinos salieron a buscar ante toda costa una ventaja que aumentara la ilusión auriazul de ser el primer equipo mexicano en conquistar la justa continental.

Primer tiempo parejo, cerrado y de pocas oportunidades en ambos marcos, teniendo como factor denominador las constantes faltas como lo dicta en su tradición el torneo libertador.

Par de gritos de gol ahogados en los 'Incomparables' y en parte de la nación que expresó sus buenas vibras al conjunto regiomontano. Minuto 17, un desborde por la banda derecha, el charrúa Egidio Arévalo envío un centro que fue desviado por la zaga argentina y el esférico angustiosamente fue a dar al travesaño, poniendo tenso al estratega de River en las bancas visitantes.

Una más del cuadro mexicano al 20' pero ahora incluyendo una buena descolgada de Jurgen Damm, con un enorme trazo para el brasileño Rafael Sobis que remató fuerte de cabeza pero con dirección central, situación que permitió a Barovero contener la pelota sin problema.

El resto de la primera mitad se tornó en faltas constantes y un fuerte reclamo local por el tiempo que se otorgó en la rehidratación, dado que los regios consideraban que el calor no era tan fuerte en la Sultana.           

Para la parte complementaria salió a relucir la grandeza del club sudamericano, sin verse intimidado ante la parcialidad regiomontana e inclusive soportando el calor del norte mexicano.

Peligro en el área de River al 59', con una gran finta de Juninho en tiro libre por la parcela derecha cediendo para Arévalo que ejecutó su disparo sin fuerza y el esférico arribó sin problema alguno a las manos de  Barovero.

La hinchada felina despertó, conocedores de que debían impulsar a los elementos de Ricardo Ferreti con mayor fuerza al frente y con esa dósis de confianza que siempre genera en el jugador, el aliento de una afición. Al 78' otra vez el central Juninho en pelota parada, pero ahora en lugar de ceder el esférico a uno de sus compañeros, prefirió disparar con fuerza y nuevamente el cancerbero de la escuadra sudamericana contuvo el balón.

Recta final del cotejo y el juvenil Damm tuvo la gloria en sus pies, luego de recibir un pase filtrado en el centro del área, eludio con categoría al arquero rival y al momento de centrar, su desempeño se vino abajo y la oportunidad se quedó en un vil suspiro regiomontano. Silbatazo final en el 'Volcán' y todo quedó en un juego sin goles favorable para los visitantes.

Tigres deberá mostrar categoría, autoridad y mantener la ilusión en el corazón para ganar la justa continental en pleno recinto argentino que sabe arder e ir con todo ante cualquier rival en cara.

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Sobre el autor
Juan Carlos Monroy
Comentarista de futbol, cubriendo la fuente de Monterrey. Comprometido con informar de manera imparcial. "DESDE LA RED" RADIO lun a vie 1pm por www.waldofernandez.com/multimedia